Grupo Gallo cierra este 2022 haciendo realidad uno de sus proyectos clave de su plan de crecimiento: la nueva planta de elaboración de caldos naturales para la que ha invertido 15 millones de euros en la construcción de una fábrica especializada en Barcelona.
Con este proyecto la compañía cierra la implementación del Plan Industrial basado en la especialización productiva de sus cuatro plantas y da un paso decisivo con el objetivo de mantener su rol de compañía referente en innovación industrial dentro de su estrategia de crecimiento; “un proyecto con sentido que supone un paso trascendental hacia el concepto de transversalidad que la compañía inició en 2019, uniendo la pasta con nuevas categorías complementarias que incentivaran su consumo: la pasta de tenedor con las salsas y ahora la pasta de sopa con el caldo natural”, ha explicado la empresa.
Sustentado por una fuerte apuesta de inversión, este proyecto disruptivo supone, además, la apuesta por la digitalización de la compañía a través de la creación de una tecnología industrial propia y exclusiva, concebida y desarrollada por el equipo de I+D de Grupo Gallo, que transformará el mercado de los caldos en España y situará el rol de la compañía como motor de cambio de este.
Grupo Gallo elaborará las cuatro variedades de caldo previstas en esta primera fase del proyecto (caldo de pollo, caldo de pollo con jamón, caldo de verduras y cocido) con las que pretende dar respuesta a la tendencia creciente en los hogares de sustituir el caldo elaborado en casa por el caldo envasado. La nueva “Olla de Gallo” permitirá elaborar el caldo de toda la vida a través de un proceso industrial eficiente y sostenible con una capacidad de producción de 140.000 litros de caldo al día, sin desperdiciar nada de materia prima.
La compañía producirá sus caldos en la nueva planta construida en Granollers, convertida ahora en una fábrica puntera a nivel europeo gracias a esta nueva actividad que, según Montserrat Tort, directora de la planta industrial barcelonesa “es una revolución que nos plantea un reto a nivel logístico, tecnológico y humano, a la vez que la sitúa la planta de Granollers como punta de lanza dentro de la estrategia de crecimiento de la compañía, liderando su primer proyecto de digitalización”.
“Estamos ante el caldo más natural del mercado y un sabor exquisito gracias a sus ingredientes frescos y naturales que tienen con el 33% de pollo fresco su máximo exponente. Este caldo va a subir el estándar de calidad de toda la categoría. Es, además, un caldo honesto y sostenible: desde el punto de vista de los ingredientes, todos ellos frescos y procedentes de productores de proximidad, que subministran producto recién cultivado y carne fresca; y desde el punto de vista del envase, con el que Grupo Gallo aporta un brick totalmente reciclable con un 87% del material de origen vegetal que cuenta con tapón de caña de azúcar”, destaca la compañía.