El 58,4% de los españoles prefiere adquirir sus productos en marketplaces, es decir, en plataformas que aúnan diferentes vendedores profesionales, pero que también permiten la venta por parte de particulares, según el último estudio de Packlink.
De hecho, esta alternativa se está imponiendo a las tiendas oficiales, que se convierten en la opción favorita de un 37,4% de los consumidores, ya sea desde su página web o desde su aplicación móvil. A pesar de la influencia de las redes sociales en los hábitos de compra, sólo un 3,4% de los españoles admite utilizar este canal de forma habitual para sus compras.
«Los resultados de nuestro estudio reflejan un cambio significativo en los hábitos de los consumidores españoles. La reventa se ha establecido como una opción preferida para deshacerse de los productos no deseados, lo que indica un crecimiento en el comercio de segunda mano. Además, observamos una clara preferencia por las compras en los marketplaces, lo que resalta la necesidad de las empresas de adaptarse a estas nuevas tendencias», señala Noelia Lázaro, directora de Marketing de Packlink.
El recommerce gana adeptos
El recommerce es un concepto que ha motivado una nueva tendencia que está aquí para quedarse. La idea de dar una segunda vida a los productos antiguos se está consolidando como una práctica cada vez más habitual en los hogares españoles. En este sentido, tanto la incertidumbre económica actual, propiciada por la inflación que aprieta los bolsillos de los consumidores, como las preocupaciones sociales por el cambio climático están elevando la popularidad de este modelo de consumo.
En este contexto, el informe de Packlink ha desvelado que el 54% de los españoles opta por la venta de segunda mano como método principal para deshacerse de los artículos que ya no utiliza. Además de en España, esta tendencia de consumo basada en el ahorro y la sostenibilidad muestra su consolidación en países como Francia (66%) o Alemania (54,3%), mientras que Reino Unido (55,8%) o Italia (53,5%) optan por ceder los artículos que ya no utilizan.
En el caso de los españoles, el 47,2% de los encuestados se inclinaría por donar sus productos usados, seguido de un 22,2% que terminaría por desecharlos. Así, la donación se convierte en el segundo método más común entre los españoles para deshacerse de sus compras antiguas, que habitualmente terminan en manos de otros familiares o conocidos, especialmente en el caso de la ropa, los juguetes, los artículos electrónicos o incluso los muebles.