CCEP está llevando a cabo un desarrollo importante en su ambición de llegar a cero emisiones neta para 2040, ya que dos de sus sitios de fabricación acaban de lanzar planes para hacer que sus operaciones sean completamente neutrales en carbono durante los próximos tres años.
En concreto, las fábricas de Chaudfontaine en Bélgica y Dongen en los Países Bajos son dos de los seis sitios que forman parte de una iniciativa piloto de CCEP, con el objetivo de convertirse en carbono neutral para finales de 2023.
En Chaudfontaine, donde se embotella la marca de agua mineral Chaudfontaine de Coca-Cola, la calefacción ya es proporcionada por turbinas hidráulicas y paneles solares que proporcionan más del 5% de la energía total utilizada en el sitio. Como parte de sus planes para convertirse en carbono neutral, el uso de combustibles fósiles en el sitio se reducirá significativamente o se eliminará cuando sea posible.
Por otro lado, más del 85% de los productos de Coca-Cola que se venden en los Países Bajos se producen en el sitio de Dongen, donde la transición para convertirse en carbono neutral ya ha comenzado a través de un plan para cambiar al uso de carretillas elevadoras eléctricas y barredoras de carreteras en el sitio, y la transición de gas, calderas y sistemas de calefacción alimentados con electricidad renovable suministrada por parques locales solares y eólicos.
Para 2040, CCEP tiene la ambición de llegar a cero neto en toda su cadena de valor y se centrará en reducir sus emisiones en un 30% durante los próximos 10 años, con el apoyo de 250 millones de euros en proyectos de reducción de emisiones durante los próximos tres años.
La compañía se está enfocando primero en reducir las emisiones en la medida de lo posible e invertirá en proyectos de compensación de carbono verificados o en proyectos que eliminen el carbono de la atmósfera solo donde sea esencial. Esta estrategia se ha incorporado a la iniciativa de carbono neutral para los seis sitios elegidos, cuyas ubicaciones se anunciarán en una fecha posterior.