Según los datos del Panel del Consumo Alimentario del MAPA, durante el primer semestre de 2025, el consumo de frutas y hortalizas frescas en los hogares españoles se situó en 3.347 millones de kilogramos, lo que representa un descenso del 0,4% respecto al mismo periodo de 2024. Este retroceso se explica principalmente por la caída en el consumo de hortalizas y patata, mientras que las frutas experimentaron un comportamiento positivo.
El consumo de hortalizas frescas bajó un 2,5%, totalizando 1.140 millones de kilogramos. Entre los productos más afectados destacan el tomate, con un descenso del 5% y 251 millones de kilogramos consumidos; el pimiento, que cayó un 6% hasta 91 millones de kilogramos; y la lechuga, endibia y escarola, con un leve retroceso del 1% y 77 millones de kilogramos. Por su parte, la demanda de patata también se redujo un 2,4%, situándose en 406 millones de kilogramos.
En contraste, el consumo de frutas frescas aumentó un 1,4%, alcanzando los 1.801 millones de kilogramos. Entre las frutas con mayor crecimiento destacan la naranja, con un aumento del 6% hasta 345 millones de kilogramos; la fresa, que subió un 6% hasta 107 millones de kilogramos; y la sandía, que experimentó un crecimiento del 15%, alcanzando los 124 millones de kilogramos.
A pesar de la ligera caída en volumen, el gasto en frutas y hortalizas frescas en los hogares creció un 7%, totalizando 7.691 millones de euros. Del total, 322 millones de euros correspondieron a frutas (+10%), 2.862 millones a hortalizas (+4%) y 507 millones a patatas (+0,4%), según los datos procesados por FEPEX.
En términos de consumo per cápita durante el año móvil hasta junio de 2025, cada persona consumió, de media, 146 kilos de frutas y hortalizas frescas al año, desglosados en 80 kilogramos de frutas, 49 kilos de hortalizas y 17 kilogramos de patata.
Estos datos reflejan una tendencia de estabilidad en el consumo de frutas y hortalizas, con un leve retroceso en volumen compensado por un aumento del gasto, lo que sugiere que los hogares continúan priorizando la calidad y la variedad de los productos frescos, a pesar de las fluctuaciones en precios y disponibilidad.