La aprobación, el año pasado, de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados, que eliminaba el IVA en las donaciones a entidades sin ánimo de lucro, ha supuesto un gran espaldarazo para organizaciones como el Banco de Productos Acompartir, que se dedica al rescate de productos nuevos de primera necesidad para distribuirlos entre personas en exclusión social. De hecho, la red de empresas donantes ha crecido el último año un 20%, mientras que el volumen de donaciones se ha incrementado un 100%.
La organización cumple 10 años de existencia en los que ha logrado recuperar cerca de tres millones de kilos de productos en perfecto estado, procedentes de los excedentes invendidos donados por 186 empresas. Durante este tiempo, ha beneficiado a dos millones de personas en situación de necesidad, gracias a la alianza con 545 entidades sociales.
Entre los bienes que proveen figuran productos de primera necesidad no alimentarios como artículos de limpieza, higiene personal, electrodomésticos, menaje del hogar, ropa, calzado, material escolar, de deporte, juguetes, etc, que “aportan dignidad y nos abren la puerta a la inclusión en la sociedad”, explica Leticia López-Cotelo, fundadora de Acompartir. Se trata de excedentes de género nuevo no vendido, descatalogado, obsoleto o devuelto por los usuarios, a los que las compañías ya no dan uso y que, frecuentemente, acaban en vertederos o en plantas destructoras en lugar de ser reutilizados.
186 empresas, fabricantes y distribuidoras, han visto en Acompartir un socio estratégico que le aporta un triple impacto: social, económico y medioambiental. Y es que la colaboración de este Banco de Productos tiene también una derivada sostenible, ya que evita la destrucción de género, lo que supone un enorme impacto para el medio ambiente.
Mayor concienciación
A pesar de estas cifras, “aún es necesaria una mayor sensibilización a nivel empresarial y social, primero de todo, para concienciar sobre la necesidad de aumentar las donaciones no alimentarias, ya que la población vulnerable tiene muchas otras carencias además de la alimentación”, asegura la fundadora de Acompartir. Y segundo, para sensibilizar a las empresas sobre la urgencia de generar menos residuos y evitar la destrucción de toneladas de productos nuevos que supone un deterioro añadido al ya existente y al que hay que parar con urgencia y determinación.
Acompartir es la única entidad con esta finalidad que presta este servicio en todo el territorio nacional. Forma parte de la Alianza Goods to Give (G2G), una red europea formada por las principales entidades receptoras de donaciones de productos no alimentarios de Francia (ADN France), Bélgica y Holanda (Goods to Give) y España (Acompartir). Juntas promueven un movimiento económico y social que intenta dar solución a dos de las grandes problemáticas que existen: la pobreza y la contaminación del medio ambiente.