La abundante cosecha obtenida en España en 2018 propició un crecimiento del 6,2% en el volumen vitivinícola exportado. Sin embargo, precisamente para poder dar salida a la gran cantidad de producto disponible, el precio medio bajó un 14%, lo que provocó una pérdida de ventas en valor del 8,8%, según el análisis de los datos de Aduanas realizado por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv).
En concreto, Castilla-La Mancha repite un año más como primera comunidad exportadora con más del 55% del volumen y el 25,6% de la facturación total, marcando por tanto la evolución global, para bien (volumen) y para mal (valor), al ser la que más aumentó sus exportaciones en términos de volumen (165 millones de litros más), pero la que más euros perdió (120 millones menos).
Las dos siguientes que más crecieron en volumen fueron Extremadura (21 millones de litros más), que superó cuatro años después a Cataluña (-10,6 millones) como tercera proveedora, y la Comunidad Valenciana (+17,4 millones), que consolida su segunda puesto.
Sin embargo, tanto Extremadura (-25,5 millones de euros) como la C. Valenciana (-17,3 millones) redujeron bastante su valor, como ocurrió también con Castilla-La Mancha; las tres fueron las únicas que registraron un precio inferior a la media de exportación española por la mayor presencia de los productos más económicos entre sus ventas, los cuales, en general, bajaron bastante de precio. Extremadura y Castilla-La Mancha rondaron los 50 céntimos por litro, mientras que el precio de la C. Valenciana bajó hasta los 92 céntimos.
Cataluña fue la segunda que más redujo sus exportaciones en términos absolutos tanto en volumen (-10,6 millones de litros), solo superada por Murcia (-28 millones), como en valor (-73,8 millones de euros), en este caso tras la ya mencionada Castilla-La Mancha. Murcia registró una importante caída también en valor (-47,4 millones de euros).
Por otra parte, las exportaciones desde La Rioja se mantuvieron relativamente estables. Es la tercera Comunidad exportadora en términos de valor pese a ser la sexta en volumen, al registrar un precio muy superior a la media por estar más enfocada a los vinos con DOP, productos de gran valor añadido.
Algo similar ocurre con Castilla y León y el País Vasco, cuyos precios medios (5,02 y 3,85 euros por litro respectivamente) solo fueron inferiores a los registrados por las regiones insulares: Baleares (8,60 euros) y Canarias (6,99 euros).
Las exportaciones castellanoleonesas y vascas registraron leves variaciones respecto a 2018, al igual que las de Canarias, mientras que Baleares creció mucho más en volumen que en valor al bajar de precio, pese a ser superior al resto.
Navarra (4,6 millones de euros más), Madrid (cuatro millones más), Galicia (1,8 millones más) y Andalucía (1,6 millones más) fueron las Comunidades Autónomas que más aumentaron el valor de sus exportaciones en términos absolutos. Mientras, Aragón sigue la tendencia global al crecer a buen ritmo en volumen, pero perder facturación.
En volumen, hay que mencionar que Navarra perdió un 20% de sus ventas por la fuerte caída del vinagre, pero el vino se mantuvo estable. Destaca en 2019 el enorme impulso de las exportaciones desde Asturias, así como desde Cantabria en volumen, pero a precios más bajos que redujeron su valor. De hecho, Cantabria es la Comunidad que menos cuota tiene en exportación vitivinícola con algo menos de 100.000 litros y de 170.000 euros.