China es uno de los destinos con mayor crecimiento de las exportaciones de alimentos y bebidas españoles desde 2007. En concreto, es el segundo mercado fuera de la Unión Europea, por detrás de Estados Unidos.
Las ventas de alimentos y bebidas a este país ya supusieron 1.112 millones de euros en 2016, un 49% más que en el año anterior. En el ejercicio 2017, el mercado chino ha consolidado su tercera posición en el ranking de exportaciones de alimentos y bebidas, sólo por detrás de la Unión Europea (Francia, Italia, Portugal, Reino Unido y Alemania) y de Estados Unidos.
Por productos, el sector cárnico es el que más interés despierta, seguido del vino, aceite de oliva, cerveza, derivados cárnicos y pescado congelado y conservas.
China se erige como un destino primordial para las exportaciones españolas del sector de alimentación y bebidas gracias a la transformación social y económica. Esta fuerte pujanza, junto con el crecimiento de la clase media y alta, ha llevado a un cambio en la demanda de productos agroalimentarios más interesado por las pautas de consumo occidentales.
“El producto español es altamente preciado en Asia. Concretamente, China ha demostrado en la última década ser un socio comercial de gran interés y con gran recorrido para nuestras exportaciones”, ha destacado Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB.