Ante la avalancha de servicios digitales, no solo el precio será un elemento diferenciador. El cliente busca la simplificación, tanto del servicio como de sus facturas, por lo que la oferta combinada de llamadas y datos móviles más servicio de banda ancha y telefonía fija ha marcado una clara línea de tendencia que ha de ir ampliándose con la aparición de nuevos servicios, que incluyan la seguridad y la domótica, para cubrir una demanda clara de los usuarios.
La fidelidad de los clientes es un bien frágil. En este mundo de múltiples opciones, la actitud de los screenagers como consumidores es volátil y las marcas deben demostrar continuamente la calidad y fiabilidad de su servicio.
Los clientes están muy dispuestos a cambiar sus preferencias si no se cumplen sus expectativas o cuando se les presenta algo nuevo y diferente. El mensaje para los proveedores de servicios y fabricantes de dispositivos es que no deberían dar nada por sentado, según un estudio publicado por el Centro de Alto Rendimiento de Accenture (CAR).
Los usuarios que prefieren a sus proveedores tradicionales para disfrutar de un servicio de vídeo de calidad ya son una minoría. Cuando desean adquirir un nuevo teléfono móvil, la mayoría de los consumidores afirma que prefiere probar una marca nueva antes que repetir con la del dispositivo que ya poseen.