Los hogares españoles se decantan por los supermercados a la hora de hacer la compra. Así, con un 51,5% de cuota de mercado se colocan como el principal formato para adquirir alimentos y bebidas en España.
Además, según el informe Alimentación en España 2011, elaborado por Mercasa, los supermercados han aumentado progresivamente su participación en detrimento del comercio especializado (24,4% de cuota) que junto con el resto de formatos tienen una presencia cada vez menos notable. Los hipermercados cuentan con una cuota cercana al 14,6%.
La desagregación del índice general del sector minorista, según los distintos modos de distribución, muestra una disminución de las ventas en todas las fórmulas comerciales respecto al año 2009 (las grandes cadenas, con una tasa del -0,3%, presentan el menor descenso en su volumen de ventas). Las empresas unilocalizadas sufren el mayor descenso (-5,3%), seguidas por las grandes superficies (-5,0%).
Sobre el total de licencias concedidas, un 33,5% se asocia al comercio de alimentos y bebidas, mientras que al mismo tiempo, cuando se analiza la superficie de venta, la participación alcanza el 19,3%. Durante el ejercicio 2010 ha disminuido el porcentaje sobre el total de licencias y se ha mantenido la participación sobre el total de superficie de venta (en el año anterior las actividades de alimentación contaban con una mayor significatividad en el porcentaje de licencias de venta).
Atendiendo al conjunto de la población se estima que existen en España 6,6 actividades comerciales y 436 metros cuadrados dedicados al comercio de alimentación y bebida por cada 1.000 habitantes.
El comercio al por menor, en términos constantes, registra en el conjunto del año 2010 un descenso interanual en sus ventas del -4,4%. Los productos de alimentación descienden un -2,2% y los no alimentarios bajan un -4,8% (concretamente, un -2,7% en equipo personal, un -5,6% en equipo del hogar y un -4,2% en otros bienes).