Las ventas de vino tranquilo han caído durante los dos primeros meses de 2011 un 0,6% en valor. No obstante, aumentan las ventas de los espumosos un 1,2%, durante el mismo periodo, según un informe facilitado por el Observatorio español del mercado del vino.
La evolución del conjunto de bebidas es positiva, con crecimiento del 1,7%, destacando el aumento de las cervezas (+4,7%), de las bebidas refrescantes (+3,9%) y de las aguas (+1,4%).
Respecto a los canales de venta, se mantiene en 2011 la mala marcha de los hipermercados (-2,9%), mientras crecen los establecimientos de tamaño medio; ligeramente el libreservicio de 400 a 1.000 metros cuadrados (+2,2%) y, con mucho mayor vigor, el supermercado entre 1.000 y 2.500 metros cuadrados (+6,6%).
Los vinos tranquilos y espumosos, junto con bebidas alcohólicas y refrescos siguen siendo los que menor presencia tienen de marca del distribuidor en valor. Además, durante el año 2010, los vinos tranquilos fueron, junto con los zumos, el único tipo de bebida en el que disminuyó ligeramente la presencia de marca de distribuidor, con una caída de tres décimas de punto porcentual respecto del año 2009. Sin embargo, durante los dos primeros meses de 2011, se produce un aumento significativo de la presencia de la marca del distribuidor tanto en vinos en general (+4,4 puntos porcentuales) como en espumosos (+5,1 puntos porcentuales).
Por otro lado, el Observatorio español del mercado del vino asegura que las exportaciones españolas de vino arrancan 2011 con subidas extraordinarias. Así, en enero las ventas al exterior aumentaron un 45% en volumen, hasta los 145,1 millones de litros, y un 23% en valor, hasta los 133 millones de euros, aunque con una reducción del precio medio del 15%.
Destaca el aumento de los vinos sin Denominación de Origen Protegida (DOP) a granel, que aumentan un 53% en volumen, hasta los 81 millones de litros y un 69% en valor, hasta los 25,3 millones de euros. Muy buena noticia es también el aumento de los vinos envasados con DOP (+39,5% en volumen y +36,2% en valor) que mejoran notablemente el ritmo de crecimiento con el que cerraron el pasado año. En cuanto a los vinos sin DOP envasados, crecen un 29% en volumen, alcanzando los 25,5 millones de litros y superando, por tanto, en casi seis millones de litros a los vinos con denominación envasados. Caen, sin embargo, en valor, con pérdida en el precio medio del -24%. Los espumosos y cavas aumentan también en volumen (+4,7%) pero caen en valor (-2,2%), mientras vinos aromatizados, de licor y de aguja presentan una evolución negativa.