La pérdida desconocida en la gran distribución en España ha descendido un 4,4% en 2010 hasta los 2.682 millones de euros frente a los 2.805 millones de euros de 2009, todo un “éxito del sector retail a pesar de la crisis económica que padecemos”, explica Mariano Tudela, director general de Checkpoint Systems para el sur de Europa, durante la presentación del Barómetro del Hurto en la distribución.
El descenso de robos se debe a un aumento en la seguridad y prevención del 5,2% con respecto al año anterior. Hasta 784 millones de euros han invertido las cadenas de distribución en seguridad, 39 millones más que el año pasado, ya que se ha comprobado que a “más gasto, menos pérdida”, asegura Rafael Alegre, vicepresidente de Checkpoint en Europa.
“En 2008, el inicio de la crisis, la tentación de los minoristas fue reducir su inversión en prevención. Esto generó un aumento de las pérdidas”, afirma Tudela. En 2009, los comerciales se han percatado de esta máxima y “comenzaron a invertir sobre todo en los productos de alto valor y mayor riesgo de hurto. Esto pudo ser rápidamente implementado con un retorno de la inversión y generó un éxito a corto plazo con el descenso de las pérdidas”, continúa el director de Checkpoint en España.
Los robos en los comercios suponen el 1,3% de las ventas de este sector, lo que se traduce en un coste por familia de 203,5 euros o 74,2 euros por persona.
El 49,4% de las pérdidas desconocidas derivan de hurtos de clientes, el 29,8% de empleados, el 4,9% de proveedores y el 15,9% de errores internos.
Las categorías con índices de hurto más alto son productos de cosmética, moda, productos electrónicos o alimentos de gama alta. Todos ellos productos pequeños de marca que sean fáciles de transportar. Para protegerlos, los establecimientos usan cada vez más protección electrónica antes de llegar a la tienda y menos estantes cerrados o vitrinas.