Empresas Kraft y sus trabajadores negocian una solución para la fábrica de El Caserío 14 enero 2009Los representantes de los trabajadores de Kraft Foods en España negocian hoy con la dirección de la compañía la búsqueda de soluciones y rechazan un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para el cierre de la fábrica de Mahón.Si a la multinacional no le interesa mantener la planta abierta, esperan que al menos permita un proceso de venta. En caso de que el grupo dé muestras favorables a esa posibilidad, aspecto a lo que en principio Kraft "no se niega", los trabajadores entienden que también "sería interesante" poder vender la marca El Caserío, aunque los planes de la empresa es trasladarla a su sede en Bélgica.Así lo detalló, en declaraciones a la agencia Europa Press, el presidente del comité de empresa, Antonio Olives, quien precisó que ayer se mantendría un grupo de trabajo con los representantes de los comités de las plantas de León y Montornés para preparar el encuentro de hoy y abordar las posibilidades que existen sobre los planes de reducción de plantilla y el cierre de la sede de Mahón.En la reunión de ayer se esperaba que saliera una "estrategia común" ante las intenciones de la empresa y con la expectativa de intentar que Kraft Foods "cambie su decisión", o que facilite la venta de la fábrica menorquina y de la marca ´El Caserío´, puesto que ello haría "más atractiva" la operación."La fábrica es competitiva, genera negocio, gana dinero cada año, la producción de 2008 es idéntica a la de 2007 y las previsiones para 2009 se mantiene. Por lo tanto, esta decisión no la entendemos", expuso el presidente del comité de empresa de Kraft en Mahón.
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