La merienda es una de las comidas que más ha variado durante los últimos años. De hecho, el 60% de las madres opina que la merienda de sus hijos es diferente a la que tomaban ellas cuando eran pequeñas, pero sólo un 8% de las madres piensa que ahora la merienda de sus hijos es más sana.
Estos datos reafirman el cambio de hábitos que se está produciendo es España en los últimos años, lo que nos lleva a tener altos índices de obesidad. Entre los cambios de hábitos más importantes se encuentran la modificación de los patrones de juego de los niños (con un claro descenso en la actividad física y un aumento del sedentarismo) y los cambios en las costumbres de alimentación (reducción de las comidas en familia, aparición de conductas caprichosas o menor colaboración de los niños a la hora de cocinar los alimentos), según datos de un estudio realizado por Choco-Krispies de Kellogg´s.
El estudio muestra además que al 90% de las madres les preocupa la obesidad infantil. Además, aunque un 85% de las madres considera la merienda una parte fundamental en la alimentación de sus hijos, el 50% de los niños escogen ellos mismos lo que va a merendar, con los riesgos que esto supone en relación con una ingesta desequilibrada de nutrientes.
Así, la fruta y los zumos naturales son las elecciones menos frecuentes a la hora de merendar, sólo el 6% de los niños los eligen como favoritos.