La cadena de distribución Carrefour ha cerrado el ejercicio de 2016 con un beneficio operativo de 2.351 millones de euros, lo que supone un descenso del 3,8% con respecto al año anterior, a pesar de la recuperación que ha experimentado el mercado español.
Las ventas totales del grupo se cifran en 76.645, un 0,4% menos con respecto al mismo periodo del año anterior. Excluyendo las ventas de combustible, las ventas se sitúan en 70.204 millones de euros, es decir, un 0,1% menos, mientras que si se excluye el efecto de las divisas, la facturación de Carrefour crece un 3,3%.
Georges Plassat, presidente y director general de Carrefour, asegura que "el aumento de las ventas, por quinto año consecutivo, atestigua la pertinencia de nuestros programas multiformato y omnichannel, que ahora es una realidad en todos nuestros países”
Este buen desempeño fue impulsado por la continua recuperación de España, así como por la mejora de la rentabilidad en Italia y Polonia, donde el grupo ha innovado constantemente desde hace varios años.
En 2016, el grupo continuó su estrategia de adquisiciones tácticas en Rumania, con las tiendas Billa, y en España, con algunas tiendas Eroski. Por último, en Francia, la transformación de las tiendas adquiridas de DIA está prácticamente terminada, con un total de 622 tiendas Carrefour.