El grupo Kellogg ha cerrado el primer trimestre de 2015 con un beneficio neto de 227 millones de dólares, lo que supone una caída del 44,1% con respecto a los 406 millones de dólares registrados en el mismo periodo del año anterior.
Según informa la empresa en un comunicado, la facturación también decrece. Con una cifra de negocio de 3.556 millones de dólares, el grupo experimenta un descenso del 5% en comparación con los 3.742 millones de dólares del mismo periodo de 2014.
John Bryant, presidente y consejero delegado de Kellogg, asegura que los resultados han “superado sus expectativas y que estaban en el buen camino" para el año.