Coyuntura Las liquidaciones de la almendra son un 30% inferiores a 2007 16 septiembre 2008La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) denuncia que los agricultores valencianos están recibiendo un 30% menos en las liquidaciones de la almendra respecto la campaña pasada, a pesar de que la producción ha sufrido un importante descenso. La organización no entiende como, en una campaña con una producción menor, y en la que han aumentado de forma considerable los costes de producción, se pueden obtener unos precios muy por debajo de los índices de 2007.
La UPA-PV afirma que las previsiones de recolección para la campaña de la almendra de 2008 están en torno a las 5.654 toneladas en la Comunidad, cuando en 2007 se registró una producción de 6.010 toneladas y en 2006 fue de 8.900. Pese haber menos cosecha, los precios de las liquidaciones percibidos por los agricultores han descendido, en lugar de ir al alza por la reducción de la oferta.
Las primeras operaciones de compra-venta realizadas en la Comunidad valenciana, y de las que tiene constancia la UPA-PV, hablan de unas liquidaciones en la variedad de la ?comuna?, 50 céntimos inferiores a las de la campaña anterior, al pasar de los 1,14 euros/kilo en la campaña de 2007 a los 0,60 euros/kilo en la actual. En el caso de la variedad de la ?marcona?, los precios se han mantenido estables, a pesar del descenso en la producción que ha sido más acuciante en esta variedad.
Este ilógico descenso en el precio de las liquidaciones de almendra (a pesar de la menor oferta existente), debe ser contextualizado, además, en un momento de dificultad económica y de escasa rentabilidad de las explotaciones agrarias valencianas, en las que se han incrementado de forma considerable los costes de producción. La UPA-PV recuerda que el precio de los fertilizantes, del agua de riego o del gasóleo, entre otros costes, se ha incrementado en el último año en torno al 35%, con lo que si los costes de producción aumentan y el precio percibido por los agricultores por sus cosechas disminuye, el cultivo de la almendra queda expuesto a pérdidas, es decir, a liquidaciones por debajo de los propios costes de producción y por tanto a la quiebra económica de centenares de explotaciones valencianas.
La UPA-PV achaca la bajada en el precio de las liquidaciones de la almendra a la tendencia liberalizadora de los mercados de estos productos que potencian importaciones desde América a un menor precio pero con una infinitamente menor calidad. La organización ilustra que el comercio compra en América una almendra de menor calidad a un menor precio, con ello arrastran los precios a la baja en España y además, lo que es más preocupante, habitúan a los ciudadanos a consumir un producto de baja calidad, lo que supone la pérdida de gustos y por tanto la desprotección de variedades tradicionales y autóctonas.