El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Torta del Casar ha dado a conocer las cifras de 2013 con una facturación de algo más de 4 millones de euros, lo que supone una caída de un 5% respecto al año anterior.
Durante la pasada campaña, la denominación certificó 297.536 kilogramos de queso de un total de 315.800 kilos producidos, un 6,7% menos que la campaña anterior. El número de unidades ha disminuido un 1,5% respecto a 2012, alcanzándose las 472.934.
El año 2013 se cerró con 21 ganaderías inscritas, 16.600 cabezas de ganado y ocho industrias en producción certificada. ángel Juan Pacheco, presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Torta del Casar, asegura que “se arrastran varias campañas malas para las ganaderías, lo que ha llevado a esta disminución de la cabaña por la imposibilidad de mantener unos resultados que hagan mínimamente rentable la explotación lechera en su conjunto, debido al aumento de costes y a los bajos precios de cordero y de leche”.
El número total de kilogramos elaborados y comercializados de Torta del Casar ha disminuido en términos absolutos aunque la relación entre estas dos variables respecto a otros años es más positiva ya que se ha incrementado en 16,4 puntos en el período 2010-2013. Para el director de la DOP Torta del Casar, Javier Muñoz, “la lucha por mejorar la calidad de la leche y del proceso de elaboración del queso gracias a la profesionalización de los operadores, así como las mayores exigencias de verificación que se han instaurado en el Consejo Regulador después de haber conseguido la acreditación por parte de ENAC, han hecho posible la salida al mercado de un producto muy homogéneo y de gran calidad”.
Sin embargo el mayor problema que se ha tenido en este año 2013 ha sido la demanda de Torta del Casar en la campaña de Navidad, “que ha sido tal que no ha podido ser atendida por la falta de producción de leche durante todo el año, y en particular en el período julio-octubre, lo que no ha permitido elaborar más queso con destino a certificación, perdiéndose parte del mercado”, explica Muñoz.
La proporción comercializada en el territorio nacional de esta clase de queso sigue siendo mayoritaria, con más de un 93%, frente a poco más del 6% de ventas en el exterior.