La Mesa Nacional del Ajo estima que la producción durante la campaña 2012-2013 se ha situado en el conjunto del país en 171.300 toneladas, lo que representa un incremento del 13%.
No obstante, la situación general es de preocupación, ya que se constatan los bajos precios que se registran en origen y unos niveles de existencias almacenadas muy superiores en comparación con iguales periodos de otras campañas.
Además, “no hay elementos que indiquen que esta tendencia de bajos precios y existencias pueda cambiar en las próximas fechas ni al inicio de la nueva campaña en el mes de junio”, explican fuentes de la Mesa Nacional del Ajo.
Los profesionales del sector ajero coinciden en señalar que el origen de esta problemática no está, como ha sucedido en anteriores campañas, en las masivas importaciones de ajo de terceros países, principalmente China, sino en un aumento de la producción interna, debido a un incremento del 10% de la superficie de siembra en la campaña 2012-2013, que se ha situado en 18.570 hectáreas.
La próxima campaña que comienza en junio es todavía una incógnita por el tiempo que falta para su inicio, por la situación de comienzo en la que se encuentran las plantaciones, y por la climatología que se registre durante la primavera, clave para una buena o mala cosecha. La Mesa confirma que la tendencia, salvo en el caso de Andalucía que reduce entre un 15-20%, es al mantenimiento de las superficies de siembra.
Para el portavoz y presidente de la Mesa Nacional del Ajo, Julio Bacete, “el escenario que registra el sector del ajo es un cúmulo perjudicial de circunstancias y hechos”, entre ellos cita la falta de unión a nivel productivo y comercial, lo que provoca, entre otras cosas, que los precios más bajos del ajo se encuentren actualmente en España.