Ferrero Ibérica traslada sus oficinas al World Trade Center de Cornellá de Llobregat (Barcelona). Será la cuarta mudanza que efectúa la compañía desde que en 1988 inició su actividad en Barcelona.
La primera plantilla tenía cinco empleados y a través de 11 distribuidores empezó su actividad en el país. Ahora, las nuevas instalaciones de 1.800 metros cuadrados acogerán a 126 empleados que dispondrán de más espacio y mejores servicios.
La mudanza a las nuevas oficinas coincide con el 25 aniversario de su implantación en España. Ferrero Ibérica tiene una facturación anual de 200 millones de euros y unas ventas de 18.000 toneladas de producto. De la filial española también depende el mercado portugués donde trabajan actualmente 29 empleados, elevando a 155 el número total de trabajadores de la compañía.
Desde su implantación en el mercado ibérico, la compañía ha apostando por el compromiso diario con los consumidores y la pasión por la investigación y la innovación.