La comisión de Pesca del Parlamento Europeo ha dado hoy luz verde a la conclusión del protocolo pesquero entre la Unión Europea y Marruecos, que permitiría a 126 buques de la UE, entre ellos 100 españoles, faenar en aguas marroquíes.
El nuevo protocolo incrementa en un 33% las posibilidades de pesca para la flota comunitaria, fundamentalmente por el aumento de la pesca pelágica industrial (de 60.000 a 80.000 toneladas).
Además, la UE reducirá la contrapartida financiera que ofrece a Marruecos desde los 36,1 millones de euros anuales del anterior protocolo hasta los 30 millones, lo que supone una disminución del 17% para las arcas comunitarias.
Sin embargo, el coste anual total del protocolo aumenta en un 1%, de los 39,5 millones de euros anuales hasta los 40 millones. Esto se debe al incremento del 194% de la contribución de los armadores.
En cuanto al embarque de marineros, la principal novedad es la obligatoriedad de elegir entre una lista cerrada propuesta por Marruecos, compuesta por titulados de las escuelas de formación marítima.
Cualquier incumplimiento por parte de Marruecos de su obligación de respetar los derechos humanos podría entrañar la suspensión del protocolo.
El Parlamento Europeo rechazó en diciembre de 2011 la prórroga por un año del anterior protocolo de pesca con Marruecos, que había finalizado el 27 de febrero de 2011. Tras el veto de la Eurocámara, la prórroga dejó de aplicarse el 14 de diciembre de 2011. La Comisión Europea empezó a negociar entonces un nuevo protocolo.
El informe de la comisión de Pesca que dio lugar al voto negativo criticaba el bajo índice coste/beneficio del protocolo anterior, la escasa incidencia de la contrapartida financiera en el sector pesquero marroquí y el impacto medioambiental del acuerdo. La situación jurídica del Sáhara Occidental fue otro de los argumentos esgrimidos por los detractores del protocolo.
La comisión parlamentaria ha seguido la recomendación de la ponente, Carmen Fraga (PPE, España), y ha dado luz verde al protocolo por 13 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones.
El informe ha sido adoptado mediante el procedimiento de aprobación, que permite al Parlamento Europeo adoptar o rechazar una propuesta legislativa, sin la posibilidad de proponer enmiendas. El nuevo protocolo pesquero debe recibir todavía el visto bueno del pleno de la Eurocámara, previsiblemente el 10 de diciembre en Estrasburgo.