El punto de venta sigue siendo determinante para el consumidor, sobre todo en un momento económico como el actual, según el Shopper Engagement Study 2012 que elabora POPAI.
“La mayoría de los compradores de productos de alimentación persiguen ahorrar dinero, por eso cuando llega el momento de tomar decisiones de compra, más decisiones que antes, un 76% para ser exactos, se producen en la tienda”, añade el estudio.
Según el informe, la cuota de decisiones de compra que se toman en la tienda ha alcanzado el nivel más alto. De ahí que el marketing y la innovación en los espacios físicos ganen más peso que nunca.
Una de cada seis compras de productos de gran consumo se produce por la existencia de un display de la marca en el punto de venta. De hecho, llamar la atención del cliente es clave: el 66% de las fijaciones oculares de los compradores (dónde y a qué miran) terminan en la cesta de la compra, según el informe.
La innovación en los lineales es otro factor decisivo. En este sentido, el gran formato comercial se sitúa a la cabeza: incorpora el 50% de los nuevos productos de gran consumo que se lanzan al mercado, frente a un 25% de media, según un informe de Kantar Worldpanel para el Observatorio de las Marcas de Gran Consumo.
La coyuntura actual, marcada por el impacto negativo que sobre el consumo tiene el desempleo y la incertidumbre económica, también influye en las decisiones de compra. El último estudio PeopleShop, elaborado por Leo Burnett, revela que casi un tercio de los consumidores busca precio en sus compras de alimentación y droguería. Por tanto, prestan más detalles a la comparación de productos, las ofertas y el ahorro entre marcas.