Nestlé ha registrado en el primer semestre del año una facturación de 45.045 millones de francos suizos, lo que supone un descenso del 2,7% respecto al mismo periodo del pasado año, si bien, en términos orgánicos supone una subida del 2,1%, según ha dado a conocer la compañía en un comunicado, en el que señala que este descenso en los ingresos se debe a la caída de los precios.
En cuento a los beneficios, se han mantenido sin cambios con una cifra de 5.644 millones de francos.
Por segmentos de negocio, el negocio de bebidas ha registrado un descenso en las ventas del 2,4% hasta los 12.041 millones de francos, mientras que la división de cuidado de mascotas ha elevado sus ingresos un 0,8% hasta los 9.452 millones y el segmento de productos de nutrición ha recortado su facturación un 2,5% hasta los 7.637 millones.
Asimismo, el negocio de platos preparados ha obtenido 5.260 millones de francos en ventas, un 11,3% menos, mientras que los ingresos de productos lácteos han alcanzado los 5.189 millones, un 4,2% menos, al tiempo que el negocio de dulces ha facturado 3.845 millones (4.026 millones de euros), un 4,1% menos y la división de aguas ha facturado 1.621 millones de francos, un 5% menos.
Según ha explicado Mark Schneider, CEO de Nestlé, “el crecimiento interno real positivo ha vuelto. Hemos logrado un mejor crecimiento del volumen y de la combinación de productos en todo el Grupo en el segundo trimestre. Nestlé Health Science se está recuperando según lo previsto y está preparada para un segundo semestre sólido. De cara al resto del año, seguiremos impulsando el crecimiento interno real mediante el lanzamiento de innovaciones que aborden las tendencias de los consumidores y el crecimiento de nuestras grandes marcas icónicas. Al mismo tiempo, hemos visto que los precios bajan más rápido de lo esperado. Por lo tanto, consideramos prudente ajustar nuestras previsiones para el año, ya que se espera que el crecimiento orgánico de las ventas sea de al menos el 3%”.