Nestlé ha invertido 1,8 millones de euros en su fábrica ubicada en La Penilla de Cayón (Cantabria) con la finalidad de preservar el agua del río. Esta cifra se enmarca dentro de los cerca de 75 millones de euros del total de inversiones realizadas por la compañía en la planta desde 2020 con el objetivo de avanzar en digitalización, automatización y sostenibilidad.
La factoría puso en marcha el pasado mes de septiembre un nuevo grupo de torres de refrigeración, que se une a otras similares que se instalaron en 2022, y que permiten que el agua que se ha utilizado durante la actividad industrial permanezca en un circuito cerrado que, mediante refrigeración evaporativa, permite su reutilización continuada. Con estas medidas se ha conseguido reducir en unos 600.000 metros cúbicos el uso de agua en la factoría, cantidad equivalente al llenado de 240 piscinas olímpicas.
La compañía ha dado a conocer estos avances durante la visita realizada este martes por la presidenta de Cantabria, Maria José Sáenz de Buruaga, con motivo de la celebración del 120 aniversario de la presencia de Nestlé en España con la instalación de su actual fábrica de chocolates, confitería, cacao soluble, cereales infantiles y obleas para empanadillas ubicada en La Penilla de Cayón (Cantabria).
La presidenta ha estado acompañada por la consejera de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del gobierno de Cantabria, Mª Jesús Susinos; el consejero de Industria, Empleo, Innovación y Comercio de Cantabria, Eduardo Arasti; el alcalde de La Penilla de Cayón, Francisco Viar, así como por el director general de Nestlé España, Jordi Llach, y la directora de la factoría, Diana del Campo.
«Hoy celebramos 120 años de Nestlé en España y 120 años de la primera fábrica de la compañía en nuestro país, un hito que refleja nuestro compromiso continuo con la sostenibilidad y la innovación en todos nuestros procesos. La reciente inversión en la planta de La Penilla de Cayón es un claro ejemplo de nuestra dedicación a la gestión responsable del agua y la reducción de nuestra huella ambiental. A lo largo de nuestra historia, hemos sido pioneros en prácticas sostenibles, y este aniversario nos brinda la oportunidad de reafirmar nuestro compromiso con el medio ambiente y la comunidad. Estamos entusiasmados por lo que el futuro nos depara y por seguir contribuyendo al bienestar de las generaciones venideras”, ha destacado Jordi Llach durante el encuentro.
Referente en la comunidad
Durante la visita, la presidenta María José Sáenz de Buruaga ha podido conocer como la fábrica cántabra de Nestlé ha representado desde sus inicios una referencia tanto a nivel local como medioambiental. Así, la factoría fue pionera en inaugurar su primera depuradora de aguas residuales en 1966, veinte años antes de que la ley obligara a ello.
Asimismo, el centro de producción se caracteriza por ser “cero residuos a vertedero”, al minimizar la generación de los mismos y fomentar su reutilización, reciclaje y valorización. Además, toda la energía eléctrica que se compra en este centro de producción proviene de fuentes renovables.
La factoría cántabra también cuenta desde 2022 con una caldera de biomasa que utiliza la cascarilla que se obtiene en el proceso de torrefacción del cacao como biocombustible para la producción de vapor que se convierte, a su vez, en fuente de energía para el propio proceso de tostado de esta materia prima.
Esta instalación, que ha supuesto evitar la emisión de unas 6.000 toneladas de CO2e a la atmósfera desde su puesta en funcionamiento, también utiliza astillas con certificación de sostenibilidad en origen “SURE”, que garantiza la cadena de trazabilidad y sostenibilidad para la producción de energía térmica. Con esta instalación, Nestlé fomenta la economía circular en sus procesos productivos.
Asimismo, la fábrica dispone desde 2023 de una bomba de calor que aprovecha la energía residual procedente de la planta de producción de frío de la factoría para calentar el agua que se utiliza tanto en los procesos productivos como en la climatización de la planta. Con este sistema la factoría ha conseguido un ahorro anual de más de 12.000 m3 de uso de agua. Además, ha logrado evitar la emisión de cerca de 2.500 toneladas de CO2e al año.
La fábrica de La Penilla es uno de los centros de producción más importantes de Nestlé España. Cuenta con una plantilla media de 900 trabajadores y se dedica a la producción de tabletas de chocolate Nestlé Extrafino y Nestlé Postres, bombones Caja Roja, cacao soluble Nesquik, cereales infantiles, productos para Nescafé Dolce Gusto y obleas para empanadillas Buitoni.










