Masymas Supermercados (Juan Fornés Fornés) refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la solidaridad, centrando sus esfuerzos en la reducción del desperdicio alimentario. Así, en el último año, la compañía ha evitado el desperdicio de más de 1.970 toneladas de alimentos.
Esta cifra se ha conseguido gracias a una estrategia integral que incluye medidas como: la gestión ajustada de pedidos; la mejora continua de procesos internos; la colaboración con la plataforma TooGoodToGo; la publicación de diversos artículos en la revista Mashogar, en la que se comparten consejos de aprovechamiento de alimentos o la aplicación de descuentos del 30% en productos cercanos a su fecha de consumo preferente.
No obstante, el mayor avance en la reducción del desperdicio se ha logrado con la mejora y consolidación del sistema de donaciones a colectivos vulnerables, implantado en la mayoría de las tiendas de la cadena. Esto ha permitido a masymas entregar 355 toneladas de alimentos a distintas entidades sociales de la Comunidad Valenciana y Murcia.
Cabe destacar que el 80% de estos alimentos donados son productos frescos, lo que permite un aporte nutricional adecuado y una rápida utilidad para las personas que los reciben. Esta iniciativa refuerza el compromiso de la compañía con una alimentación saludable y accesible para los colectivos más vulnerables.
Con todas estas medidas, masymas ha invertido a lo largo de este año un total de 2,4 millones de euros, lo cual reafirma su compromiso con una alimentación más justa, sostenible y solidaria. De esta manera, se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Reducir el desperdicio alimentario no es solo una cuestión de sostenibilidad, sino también de solidaridad. Cada alimento aprovechado supone una oportunidad para ayudar redundando en un mayor bienestar para la sociedad.