Los productos frescos son los que más variación de precio tienen de un supermercado a otro, pues que de media se puede llegar a pagar hasta un 70% más por el mismo producto, según OCU, que ha puesto en marcha un Observatorio de precios en el que analizará los precios de 100 productos muy comunes que se compran en los supermercados.
La toma de precios se repetirá con una periodicidad mensual para poder seguir su evolución en todas las épocas del año y en distintos establecimientos. En concreto, anotará los precios online de ocho grandes cadenas: Alcampo, Carrefour, Día, Mas, Ahorramas, Lidl, Mercadona y Supermercados El Corte Inglés.
La cesta incluye alimentos frescos, productos de marca blanca y productos de fabricante. Además de alimentos, se incluyen también los productos de droguería e higiene más comunes.
En la toma de datos del mes de junio la organización destaca el grupo de productos más caros, los que cuestan más de siete euros por litro o por kilo. Entre ellos se encuentran los alimentos que siempre han sido caros y eran esperables, como las carnes y los pescados, que deberían estar presentes en una dieta equilibrada. Por ello, OCU reitera su petición de la retirada del IVA también en estos alimentos. En este grupo encontramos también a algunos licores.
Sin embargo, un invitado menos esperado en este grupo son los aceites de oliva, tanto el extra como el suave. De hecho, el aceite es el producto que más se ha incrementado de precio con subidas que alcanzan el 225% en los últimos meses. La actual retirada del IVA del aceite de oliva intenta atenuar los desorbitados precios de este producto esencial en las cocinas de nuestro país. Veremos si lo consigue y estaremos atentos a su precio en los próximos meses.
¿Se puede ahorrar?
Partiendo de la base de que todos los supermercados han subido sus precios y que las grandes cadenas lo han hecho en una proporción bastante parecida, sí hay alimentos donde las diferencias son mayores y donde compensaría más mirar bien donde los compras, señala OCU.
Entre los diez alimentos y productos en los que ha encontrado mayores diferencias entre las tiendas se encuentran, como ya hemos visto, los productos frescos. Y entre los productos con mayores diferencias abundan también los genéricos o «marcas blancas», lo cual no es ninguna sorpresa porque es donde los supermercados cuentan con mayor libertad para buscar proveedores y negociar sus precios con ellos. Estos productos propios de cada supermercado presentan una diferencia de precio del 33%.
Los productos de marca de fabricante son los más homogéneos en cuanto a precios entre los supermercados, con una variación del 21% entre la tienda más cara y la más barata.