En un año marcado por la volatilidad geopolítica y el aumento de los costes energéticos y laborales, la industria papelera en España muestra resiliencia mediante un incremento en sus exportaciones. Las exportaciones españolas de celulosa, papel y cartón han crecido un 4,5% en comparación con el año anterior, destacándose Europa como el principal mercado. Especialmente notable es el aumento del 23,8% en la exportación de celulosa, a pesar de un contexto de adversidades económicas.
La facturación del sector alcanzó los 5.261 millones de euros. Sin embargo, factores como los altos costes de la energía, el encarecimiento de las materias primas, la caída de la demanda y el incremento de los costes laborales han mermado la competitividad de la industria, afectando negativamente los resultados.
A pesar de estos desafíos, la producción de celulosa y papel en España solo disminuyó un 2,9%, una caída mucho menor comparada con el descenso del 11,8% en Europa. Esto permite a España mantenerse como el sexto productor de papel y cartón y uno de los cinco principales productores de celulosa en la Unión Europea. El papel para envases y embalajes sigue siendo el mayor segmento de producción, representando el 68,9%, seguido de productos higiénicos y sanitarios (13,4%), prensa e impresión (11%) y otros papeles especiales (6,7%).
La industria sigue comprometida con la inversión, destinando 288 millones de euros, lo que representa un 5,5% de la facturación anual. Estas inversiones están enfocadas en la innovación tecnológica, el aumento de la capacidad de producción y mejoras en la calidad y el medio ambiente.
Además, el sector emplea a 16.964 personas de forma directa y genera alrededor de 85.000 empleos indirectos, contribuyendo significativamente a la cohesión social y territorial del país.
Contexto y producción
En medio de un escenario económico complicado, marcado por las tensiones energéticas y conflictos bélicos en Ucrania y Oriente Medio, la industria papelera española ha enfrentado una reducción en la producción de pasta, papel y cartón. Sin embargo, las exportaciones han mostrado un crecimiento destacable, consolidando la importancia del mercado internacional para este sector.
En 2023, la producción de celulosa en España aumentó un 4,3%, alcanzando 1,6 millones de toneladas, un contraste positivo frente a la disminución del 9,1% registrada en Europa. España se mantiene como el quinto mayor productor de celulosa en la Unión Europea. Por otro lado, la producción de papel y cartón se redujo un 4,6%, sumando un total de más de seis millones de toneladas, aunque esta disminución es menor comparada con la caída del 13% en Europa. España ocupa el sexto lugar en producción de papel y cartón en la UE.
El consumo de celulosa disminuyó un 15,1%, situándose en 1,6 millones de toneladas, posicionando a España como el sexto mayor consumidor de celulosa en Europa. En cuanto al papel y cartón, el consumo se redujo un 9,8%, alcanzando las 6,3 millones de toneladas. A pesar de esta reducción, España se mantiene como el quinto mayor consumidor de papel en la UE.
En términos de reciclaje, España destaca con una tasa del 83,4%, siendo el tercer país más reciclador de la Unión Europea. En 2023, se reciclaron 4,8 millones de toneladas de papel usado, apoyado por un eficiente sistema de recuperación en comercios, industrias y municipios.
Las exportaciones de celulosa aumentaron un 23,8% en 2023, mientras que las importaciones disminuyeron un 14%. En cuanto a papel y cartón, las exportaciones registraron una leve caída del 1,7%, exportándose un total de 2,4 millones de toneladas. Las inversiones en innovación y mejoras tecnológicas continúan siendo una prioridad, con un enfoque particular en la sostenibilidad y la eficiencia.
La industria papelera en España sigue mostrando capacidad de adaptación y crecimiento en un entorno desafiante. La apuesta por la exportación y la sostenibilidad, junto con un fuerte enfoque en la innovación y el reciclaje, subraya la importancia de este sector en la economía española y su compromiso con el desarrollo sostenible.