El empleo en agricultura, ganadería y pesca se mantiene prácticamente estable en España, con 759.000 ocupados en el primer trimestre de 2025, lo que representa el 3,4% del mercado laboral. Sin embargo, el informe Mercado de trabajo en el sector de Agricultura, ganadería y pesca de Randstad Research alerta sobre dinámicas estructurales que marcarán el futuro del sector: el auge del empleo extranjero, el aumento de la participación femenina y el fuerte envejecimiento de la fuerza laboral.
El subsector agrícola y ganadero concentra el 93% de los ocupados (704.928 personas), con un crecimiento interanual del 1,8%. En el extremo opuesto, silvicultura, pesca y acuicultura (53.811 ocupados) experimenta una contracción del 22,5%, la mayor en los últimos años.
Dentro del subsector ganadero destaca la incorporación de mano de obra extranjera, que crece un 53% en solo un año, frente a un retroceso del 1,3% en el empleo de nacionales. En conjunto, el 72% de los trabajadores del sector son españoles y alrededor de 200.000 son extranjeros, con menor presencia en pesca y acuicultura (14%).
El empleo femenino alcanza ya el 27,7% del total, con 210.623 trabajadoras, frente al 23% que suponía en 2019. La agricultura y ganadería concentran la mayor parte, con 203.444 mujeres, lo que supone un 29% de la ocupación del subsector. Destaca especialmente el crecimiento en cultivos no perennes (cereales, hortalizas o tubérculos), donde la presencia femenina aumentó un 25,8% en un año.
En ganadería, el empleo femenino creció un 8,4%, más del triple que el masculino (2,6%). Una tendencia que refuerza la diversificación del empleo en un ámbito históricamente masculinizado.
Envejecimiento y baja incorporación juvenil
Uno de los principales retos es la pirámide demográfica del empleo. Más de la mitad de los trabajadores tiene 45 años o más, y los mayores de 55 representan ya el 27,7% del total. En contraste, solo el 4,5% de los ocupados pertenece al grupo de 16 a 24 años, lo que plantea dudas sobre la sostenibilidad del relevo generacional.
El 34% de los asalariados del sector cuenta con un contrato temporal, un nivel muy por encima de la media nacional. En agricultura y ganadería este porcentaje asciende al 35%. Además, el 28% de los contratos indefinidos corresponde a la modalidad de fijos-discontinuos, lo que refleja la estacionalidad inherente a las campañas.
La distribución territorial muestra un claro liderazgo de Andalucía, con 243.593 ocupados (32,6% del total nacional). Le siguen Murcia (10,7%), Galicia (9,4%) y Castilla y León (7,8%). Estas cuatro comunidades suman más del 60% del empleo. En subsectores, Galicia concentra el 39,6% del empleo en pesca y acuicultura, frente al dominio andaluz en agricultura y ganadería (34,6%).