El sector agroalimentario español consolida en 2024 su peso estratégico en la economía nacional y su fortaleza en el contexto europeo, según revela la octava edición del Observatorio sobre el sector agroalimentario español en el contexto europeo, elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) y promovido por Cajamar. El informe, presentado por el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, y la secretaria general de Recursos Agrarios y Seguridad Alimentaria, Ana Rodríguez, destaca un crecimiento del 3,9% en el valor añadido bruto (VAB) del sector, que alcanza los 125.160 millones de euros, en contraste con la caída del -2,9% registrada de media en la UE-27.
Este crecimiento posiciona a España como la cuarta economía agroalimentaria de Europa, aportando un 12,3% del VAB comunitario del sector. La actividad agroalimentaria, que incluye producción primaria, transformación industrial y comercialización de alimentos y bebidas, representa en conjunto el 8,6% del PIB español y el 11,5% del empleo total, con más de 2,5 millones de trabajadores.
El dinamismo del agroalimentario español en 2024 se explica, principalmente, por el buen comportamiento del sector primario, cuyo VAB creció un 8,3%, compensando los avances más moderados de la industria de alimentación y bebidas (2,7%) y la comercialización (0,1%).
En cuanto al empleo, se registró un incremento del 1,4%, con 2,5 millones de personas empleadas. No obstante, el informe vuelve a señalar dos retos estructurales persistentes: la escasa participación femenina —solo el 31,3% en el sector primario e industrial frente al 46,4% en el conjunto de la economía— y el envejecimiento de la mano de obra, ya que el 37,6% de los trabajadores tienen 50 años o más.
Récord histórico de exportaciones
Uno de los grandes hitos del año fue el récord histórico de exportaciones agroalimentarias, que alcanzaron los 76.356 millones de euros, un 5,9% más que en 2023. Este crecimiento se debió, sobre todo, al aumento del volumen exportado (+4,4%) más que a una subida de precios, lo que demuestra la competitividad real del sector.
Con este volumen, el agroalimentario aporta el 19,5% del total de las exportaciones de bienes de España, el mayor peso entre los países exportadores de la UE. Además, genera un superávit comercial de 18.776 millones de euros, el segundo más alto de la Unión, solo por detrás de Países Bajos.
El 67% de las exportaciones tiene como destino la UE-27, siendo Francia, Alemania, Italia y Portugal los principales compradores. Entre los mercados extracomunitarios, destaca Reino Unido (6,7% del total), mientras que Estados Unidos se afianza como segundo destino fuera de la UE, por delante de China, cuya cuota sigue disminuyendo.
Otro de los factores destacados por el informe es el mayor nivel de productividad del sector agroalimentario español frente a la media comunitaria. En 2024, fue un 14,4% más productivo que la UE-27, y un 41,9% más si se excluye el comercio. Esta productividad se traduce en una competitividad elevada, con costes laborales por unidad de VAB un 19% inferiores a los de sus competidores europeos.
En particular, el sector primario español se sitúa como el más competitivo de toda la UE-27, con un coste laboral por unidad de VAB un 56% menor. La industria alimentaria también destaca con un 19% menos de coste laboral, mientras que el subsector de comercialización muestra un comportamiento más débil, siendo un 24% menos competitivo que la media europea.
En términos de ranking, el agroalimentario español ocupa la cuarta posición en competitividad dentro de la UE-27, y lidera la clasificación en el caso del sector primario.
Pese a su elevada eficiencia, el informe vuelve a señalar como asignatura pendiente la inversión en I+D. En 2024, creció un 5,8% tras dos años de retroceso, pero su peso en el total de la inversión empresarial nacional sigue siendo bajo (3%). El esfuerzo inversor del sector (0,55% del PIB) se sitúa aún por debajo de la media comunitaria (0,8%).
No obstante, España lidera la ejecución de proyectos de innovación en el marco del EU-CAP Network, con 244 iniciativas de las 973 desarrolladas en la UE-27, y mantiene el séptimo puesto europeo en inversión en FoodTech, con un incremento del 13% en 2024.
Precios contenidos y gasto alimentario inferior a la media europea
En un contexto marcado por la moderación inflacionista, el informe destaca una normalización de los precios alimentarios: la tasa de inflación anual fue del 1,8% en diciembre de 2024, frente al 7,3% de 2023 y el 15,7% de 2022.
En términos relativos, la cesta de la compra española es más barata que la media de la UE-27 en casi todos los productos, salvo en las bebidas no alcohólicas, que son un 1,6% más caras. En 2024, los hogares españoles destinaron el 19,6% de su gasto al consumo de alimentos y bebidas, frente al 18,4% en Europa. No obstante, el gasto per cápita se sitúa en 2.510 euros anuales, un 13% inferior al promedio comunitario.
Para Joaquín Maudos, director del informe, los datos reflejan «la buena salud del sector agroalimentario español en el contexto europeo, tanto por su capacidad de generación de riqueza como por su competitividad». No obstante, advierte sobre retos estructurales, como el envejecimiento de la fuerza laboral, el tamaño reducido de muchas empresas o la necesidad de avanzar en sostenibilidad e innovación para adaptarse a un consumidor cada vez más exigente y consciente.
En palabras de Eduardo Baamonde, presidente de Cajamar, “el informe confirma que el sector agroalimentario continúa siendo uno de los pilares fundamentales de la economía española, apoyado en su capacidad exportadora y su competitividad”. Por su parte, la secretaria general del MAPA, Ana Rodríguez, subrayó “la implicación del Ministerio en apoyar al sector y reforzar su papel estratégico en el desarrollo económico, social y medioambiental del país”.
Con estos resultados, el sector agroalimentario español no solo resiste en un entorno económico incierto, sino que sigue creciendo y consolidando su protagonismo en el panorama europeo, demostrando su solidez, capacidad de adaptación y potencial de futuro.