Cabreiroá, el negocio de aguas de Hijos de Rivera, mantuvo en el pasado ejercicio su tendencia de crecimiento de los últimos años. Así, la compañía cerró 2018 alcanzando un incremento del 11,5% tanto en volumen como en facturación, con una facturación de 28,9 millones de euros y una producción de 90 millones de litros envasados.
Estas cifras han permitido que Cabreiroá pueda seguir creciendo en sus instalaciones de Verín (Ourense), donde mantiene una plantilla estable que se sitúa en torno a las 50 personas y ha ejecutado una inversión de más de 1,7 millones de euros en el marco de un ambicioso plan de modernización por el que ya aportó 4,5 millones en los tres años anteriores. Además, espera invertir otros cinco millones de euros en los próximos dos años en estas instalaciones.
De este modo, Cabreiroá está llevando a cabo “una importante ampliación de su capacidad productiva y de almacenamiento que le permitirá afrontar con tranquilidad el futuro más inmediato y dar respuesta a la creciente demanda del mercado. Todo ello teniendo en cuenta la inversión habitual destinada al exquisito cuidado que requiere el propio manantial y su perímetro para preservar la calidad de sus aguas”, tal y como ha destacado la marca en un comunicado.
Por otro lado, con el objetivo de avanzar en sostenibilidad y respeto al medio ambiente, Cabreiroá acaba de lanzar una botella de un litro con un 50% de pet reciclado, algo que se enmarca en un plan por el que se irá incorporando progresivamente el pet reciclado en todos los envases de agua de la compañía que ya cuentan a día de hoy con un porcentaje 25% en todos los casos. Además, las etiquetas de las botellas se convierten en un soporte visual para trasladar mensajes de concienciación medioambiental al consumidor.
Desde la compañía señalan que “la apuesta de la compañía por el negocio de aguas en los últimos años se ha materializado tanto en importantes inversiones para conseguir mejoras en las instalaciones industriales como en cambios de envases o ampliaciones de formatos que nos permiten disponer de mayor flexibilidad para dar respuesta a las demandas del mercado”. Además, se han creado significativas sinergias con otros manantiales del grupo empresarial como Agua de Cuevas (en Felechosa, Asturias) o Fontarel (en Loja, Granada).