El Consejo de la Unión Europea ha adoptado este martes las ambiciosas medidas propuestas por la Comisión para hacer frente a los desechos marinos procedentes de los 10 productos de plástico de un solo uso que se encuentran con más frecuencia en las playas europeas, así como a los artes de pesca abandonados y los plásticos oxodegradables.
Las normas relativas a los plásticos de un solo uso y los artes de pesca, que ya obtuvo el visto bueno del Parlamento Europeo el pasado mes de marzo, contemplan diferentes medidas aplicables a distintos productos y sitúan a la UE en la vanguardia de la lucha mundial contra los desechos marinos.
En concreto, la normativa recoge que los productos de plástico de un solo uso (como cubiertos, platos y pajitas) no podrán comercializarse cuando haya alternativas fácilmente disponibles y asequibles. En el caso de otros productos, el objetivo consiste en la limitación de su uso mediante la reducción del consumo a escala nacional, la introducción de requisitos de diseño y etiquetado y la imposición de obligaciones de gestión y limpieza de residuos a los productores.
Tal y como ha señalado el vicepresidente primero Frans Timmermans, responsable de Desarrollo Sostenible, “en la sociedad europea existe una creciente sensación de urgencia con respecto a la necesidad de hacer lo que haga falta para detener la contaminación por plásticos en nuestros mares”.
“La Unión Europea está respondiendo a esta clara demanda ciudadana. Hemos dado pasos ambiciosos e introducido medidas concretas para reducir la utilización de plásticos de un solo uso. Las nuevas normas adoptadas hoy nos permiten proteger la salud y salvaguardar nuestro medio ambiente natural, fomentando al mismo tiempo una producción y consumo más sostenibles. Todos podemos sentirnos orgullosos de que Europa esté estableciendo normas nuevas y ambiciosas que muestren el camino a seguir al resto del mundo”, ha añadido.
Por su parte, el vicepresidente Jyrki Katainen, responsable de Fomento del Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad, ha destacado que “en una economía moderna, debemos reducir la cantidad de desechos de plástico y asegurarnos de que reciclamos la mayor parte del plástico que usamos. Formas de producción más innovadoras y sostenibles ofrecerán nuevas oportunidades a las empresas europeas y aumentarán la competitividad, el crecimiento y el empleo. Una vez aplicadas, las nuevas normas no solo abordarán la contaminación por plásticos, sino que también harán de la Unión Europea el líder mundial a la hora de adoptar una política de plástico más sostenible, impulsando así nuestra economía circular”.
“Las pajitas o los tenedores de plástico son objetos pequeños que pueden provocar daños graves y duraderos. La legislación sobre los plásticos de un solo uso abordará el 70% de los objetos que constituyen los vertidos marinos, lo que evitarña daños al medio ambiente que, de otro modo, costarían 22 000 millones de euros de aquí a 2030. La UE ha actuado con celeridad y eficacia con una propuesta que la Comisión presentó hace tan solo un año. Se trata de un ejemplo de la legislación europea en su mejor expresión: una legislación que responde a la demanda ciudadana, beneficia al planeta y a sus habitantes y lidera verdaderamente la tendencia mundial”, ha afirmado, por su parte, el comisario de Medio Ambiente, Asuntos Marítimos y Pesca, Karmenu Vell.