Cincuenta años después desde que Tomás Pascual adquiriese una cooperativa láctea en 1969, la compañía Calidad Pascual se ha convertido en uno de los mayores grupos empresariales del sector lácteo en España.
Para celebrar este aniversario, la empresa láctea ha reunido a casi 800 personas en Madrid entre los cuales destacan el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y los presidentes de las Comunidades de Madrid y Castilla y León, Pedro Manuel Rollán Ojeda y Juan Vicente Herrera, respectivamente.
De este modo, el ministro Planas ha subrayado el carácter emprendedor y pionero de Tomás Pascual, al que conoció personalmente mientras trabajaba en Europa, dos características que “han impulsado siempre a esta compañía”.
Durante su discurso en el acto de conmemoración de los 50 años de Calidad Pascual, el titular del MAPA ha revelado los cinco retos a los que se enfrenta el sector agroalimentario: sostenibilidad, digitalización, innovación, calidad e internacionalización. Todos ellos han sido alcanzados ya con éxito por parte de la compañía láctea, ha asegurado el ministro.
Por su parte, Rollán ha señalado en su intervención que la “principal seña de identidad de Calidad Pascual es su anticipación a las necesidades del consumidor, siempre bajo la premisa de la calidad”.
En este sentido también se ha postulado el presidente de la Junta de Castilla y León al reseñar “la apuesta por la calidad, desarrollando constantes innovaciones que han sabido anticiparse a las necesidades de los consumidores hacia productos más saludables”.
Además, ha destacado la gran capacidad de trabajo y la moderna visión de negocio de la compañía, “que hace que sea una de las grandes empresas de España”, a pesar de que “mantiene los mismos valores, raíces y señas de identidad de siempre”.
Entre las intervenciones que han tenido lugar durante el acto también destaca la del actual presidente de Calidad Pascual, Tomás Pascual, que ha agradecido a todos los asistentes participar en “este acto que refleja la aventura de unos empresarios pioneros que se atrevieron a asumir riesgos, guiados siempre por los valores de la integridad, pasión y calidad”.
“Cincuenta años no se cumplen todos los días, aunque esperamos llegar a cumplir los 100 años”, ha explicado Pascual.
Calidad Pascual exporta hoy a casi 70 países, cuenta con una gama de más de 200 productos, 6 plantas, 27 delegaciones comerciales Qualianza y más de 2.200 empleados. Ha sido medio siglo de innovación y compromiso saludable, pero siempre con una única filosofía: mejorar la calidad de vida de las personas. La compañía ha sabido adaptarse a un mundo en permanente transformación, a una sociedad cada vez más informada, exigente y sostenible.
Para dar respuesta a los grandes desafíos de la sociedad actual, Sonia Pascual ha explicado que la clave está en poner a las personas en el centro de la estrategia empresarial: “hoy día se dice que solo pervivirán las marcas con valores, las empresas que tengan un propósito claro y que aporten a la sociedad algo relevante. Hay que escuchar a las personas, hacerlas partícipes, y actuar en consecuencia, con coherencia y consistencia en toda la cadena de valor”.
Eldiscurso del CEO-director general ejecutivo de Calidad Pascual, José Luis Saiz, ha dedicado sus palabras a ‘las ocho razones de la sostenibilidad’. “Trabajamos para gestionar productos y marcas pensando en el medio y largo plazo. Nuestra misión habla de fidelizar consumidores, clientes y colaboradores, ser una empresa en continua progresión, que trascienda y genere valor de forma sólida y los resultados de forma ética y sostenible” ha afirmado Saiz.
Por último, han intervenido los miembros de la tercera generación de la familia Pascual. La empresa siempre ha sostenido que la clave del éxito del negocio ha sido mantener la familia unida y vinculada al proyecto, siempre de forma dinámica y constructiva. Conscientes de ello, los nietos de Don Tomás Pascual Sanz, Tomás Pascual Recuero y María Torres, han hablado de su aportación al futuro de la empresa. “Nuestra misión será mantener la empresa viva y hacerla crecer, como hicieron nuestros padres y como queremos que hagan nuestros hijos. Todos los miembros de la tercera generación lo tenemos claro y desde pequeños vamos dando pasos para integrarnos y armonizar la relación familia – empresa”, han explicado.
Los jóvenes han hablado también de los retos que depara el futuro y cómo todo ello va a afectar al ámbito empresarial y a las relaciones con los consumidores. La tercera generación tiene claro que tendrán que adaptarse a los cambios, pero sin perder la esencia de los últimos 50 años. “Aunque cambien muchas cosas, algunos de los principios del legado que hemos recibido deben seguir vigentes. Debemos seguir teniendo un propósito, una visión, un objetivo social, unos valores. Debemos seguir siendo sostenibles y rentables”, han concluido.