La agencia de calificación Moody 's Investors Service ha rebajada este viernes a DIA su rating un escalón hasta situarla en Caa2, lo que deja a la compañía española en una situación de alta probabilidad de insolvencia.
Tal y como ha señalado Vincent Gusdorf, vicepresidente senior de Moody's Analyst and Analyst Leader para DIA, “hemos rebajado las calificaciones de los bonos de DIA para reflejar la condición de los instrumentos de deuda", que ha añadido que “aunque las nuevas facilidades de crédito se han mejorado, el éxito de la compañía aumentará su perfil de liquidez y calidad crediticia en niveles sostenibles".
De este modo, Moody's ha rebajado las calificaciones de los bonos de DIA a Caa2 de Caa1 porque considera que la reciente refinanciación se cerró el 31 de diciembre de 2018 y redujo las perspectivas de recuperación de los tenedores de bonos. Los bancos acordaron prever un total de 896 millones de euros para financiar el capital de trabajo de la compañía y las necesidades de financiamiento a corto plazo.
La agencia de calificación cree que una implementación exitosa del aumento de capital de 600 millones de euros requiere que la compañía estabilice tanto su perfil de liquidez como su calidad crediticia. Aunque DIA pretende tener una junta de accionistas en los próximos meses, este plan debe ser aprobado al menos por el 50% de los accionistas de la compañía. “En esta etapa, no está claro si el inversor LetterOne, que posee el 29% de las acciones de DIA, respaldará el aumento de capital, ya que se diluirá su participación si decide no participar”, añade.
Asimismo, explica que DIA ha logrado respaldo con Morgan Stanley & Co con un crédito positivo, sin embargo, esta suscripción está sujeta a las condiciones que, según Moody's, “crean algunas incertidumbres dado el deterioro de la participación de mercado de la compañía en España y su débil gobierno, como lo demuestra la divulgación de muchos errores de contabilidad y el reciente cambio en el director ejecutivo”.
Moody's cree que el perfil de liquidez de DIA es un obstáculo importante para la compañía si aún está operando de manera sostenible e implementando sus medidas de reestructuración. La agencia de calificación pronostica un total de 200 millones de euros para el primer semestre de 2019 y un flujo de efectivo libre negativo de alrededor de 100 millones de euros para todo el año.
De este modo, el proceso de revisión de calificación se centra en la capacidad de DIA para obtener la aprobación de los accionistas y lanzar un aumento de capital; el apoyo de LetterOne a esta transacción; las fuentes de liquidez a corto y mediano plazo y el resultado de futuras negociaciones con los bancos, principalmente con respecto a las perspectivas de recuperación de los tenedores de bonos; y la capacidad de la DIA para fortalecer su gobierno.