La filial española de la cadena de distribución Carrefour ha cerrado el primer semestre del año con una facturación total de 4.413 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 6,9% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Este resultado tan positivo se produce gracias a la “existosa integración de los supermercados Eroski”, explica la compañía en un comunicado.
En este semestre, las ventas de la cadena en España registraron un incremento del 9,4%, hasta alcanzar los 2.302 millones de euros.
En general, la cadena francesa ha cerrado este semestre con un beneficio neto atribuido de 78 millones de euros, lo que supone un retroceso del 39,5% con respecto al primer semestre de 2016. La facturación total del grupo se cifra en 43.053 millones de euros, un 6,2% más que un año antes