La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) celebra el Día Mundial de los Derechos del Consumidor estudiando el perfil del consumidor que configura los nuevos hábitos de consumo en alimentación.
Así, explica que los principales parámetros que influyen en los hábitos de consumo tienen que ver con la demografía, la urbanización y la digitalización. En lo que respecta a la evolución demográfica, destaca el aumento de la esperanza de vida y el consiguiente incremento de las personas mayores, así como el mayor número de hogares con un solo miembro y unidades familiares pequeñas.
El supermercado de proximidad responde a la demanda de cercanía, de productos adaptados, de precios competitivos y de servicio.
Además, el nuevo consumidor está altamente digitalizado. Tiene a su disposición una gran cantidad de información y este hecho supone un incentivo para incrementar los niveles de competencia y eficiencia en la cadena alimentaria. El consumidor digital demanda nuevos servicios relacionados con el comercio electrónico pero también se interesa en cuestiones como la información nutricional de los alimentos o la sostenibilidad medio ambiental y busca diferentes canales de contacto con el supermercado en los que obtener esta información.
El modelo de distribución en España, cuyo pilar es el supermercado de proximidad, responde a las características y demandas del consumidor actual y lo hace asegurando su derecho a una oferta completa y equilibrada de productos de alimentación e higiene con los mayores estándares de calidad, seguridad alimentaria y precios muy competitivos, seis puntos por debajo de la media europea, según el Barómetro de Eurostat.