La Comisión Europea ha presentado un proyecto de reforma de la política de información y de promoción de los productos agrícolas y alimenticios europeos. Esta nueva política, que cuenta con un presupuesto reforzado y, en el futuro, con el apoyo de una agencia ejecutiva europea, está destinada a ser un instrumento útil de conquista de mercados.
Bajo el lema “Disfrútalo, viene de Europa”, pretende ayudar a los profesionales del sector a acceder a los mercados internacionales y a sensibilizar a los consumidores acerca de los esfuerzos realizados para ofrecer productos de calidad, sobre la base de una verdadera estrategia definida a nivel europeo.
Dacian Ciolos, comisario europeo de Agricultura y Desarrollo Rural, ha declarado: “en un mundo en el que los consumidores son más sensibles a la seguridad, la calidad y la sostenibilidad de los métodos de producción alimentaria; los agricultores y las pequeñas y medianas empresas europeas tienen un as en la manga. El sector agrícola y agroalimentario europeo es conocido por la calidad de sus productos y el respeto de normas sin parangón en todo el mundo. Con unas exportaciones que ya superan los 110.000 millones de euros, este sector se erige como un activo considerable para dinamizar el crecimiento y el empleo en el seno de la Unión Europea”.
La propuesta es la continuación de un amplio debate en curso desde 2011 sobre un Libro Verde (IP/11/885) seguido de una Comunicación (IP/12/332). La propuesta será ahora transmitida al Parlamento Europeo y al Consejo. Los principales elementos establecidos en esta reforma son los siguientes:
– Un aumento significativo de las ayudas destinadas a las acciones de información y de promoción con el objeto de promover la competitividad de la agricultura europea. Las ayudas europeas deberían aumentar progresivamente de 61 millones de euros en el presupuesto de 2013 à 200 millones de euros en 2020.
– La puesta en práctica de una estrategia europea de promoción que permitirá mejorar la orientación de las acciones de promoción. Esta estrategia deberá conducir a aumentar el número de programas destinados a terceros países y programas plurales (programas presentados por organizaciones de varios Estados miembros) mediante un índice de cofinanciación más elevado para estas dos categorías: 60 % de cofinanciación UE en vez de 50 %. En el mercado interior, mejorar el bajo nivel de conocimiento de los consumidores sobre las cualidades de los productos agrícolas europeos, en general, y de los productos reconocidos por los sistemas europeos de calidad, en particular.