El sector de bebidas espirituosas mantiene la tendencia negativa acumulando más de un 40% de caída desde el inicio de la crisis. Con lo que respecta a 2012, el volumen de bebidas espirituosas comercializadas se situó en 220 millones de litros, lo que supone una caída del 6% con respecto al año anterior.
Los resultados se han presentado en la Asamblea General Anual de la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE), celebrada hoy y que ha contado con la presencia del Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete.
El director ejecutivo de la Federación, Bosco Torremocha, asegura, no obstante, que las exportaciones han crecido un 15,5%, lo que ha contribuido a cerrar el año “algo mejor de lo esperado”, teniendo en cuenta el descenso del consumo interno en España.
Todas las categorías, excepto las ginebras y el tequila, experimentan un descenso de las ventas. Así, la moda del gintonic permite que este segmento crezca un 7,3%, lo que la sitúa como la tercera categoría más vendida en España, con una cuota del 14,1%. El whisky sigue siendo la categoría más consumida con el 31,5% de la cuota de mercado, seguido del ron con el 20,5%.
El sector acumula así un decrecimiento continuado en los últimos diez años. Desde 2003, con una caída estructural que oscilaba entre el 1 y el 2% anual y, posteriormente, agravada desde el 2008 con la crisis, acumulando en estos últimos cinco años una caída del 38%. Unos datos que siguen impactando en una industria compuesta en un 80% por pequeñas y medianas empresas familiares y de la que dependen 330.000 puestos de trabajo, directos e indirectos.
Además, durante la Asamblea, el Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, y el Presidente de FEBE, Pelayo de la Mata, han firmado un convenio marco de colaboración para potenciar acciones que fomenten la cultura y el arraigo agrícola del sector de bebidas espirituosas, optimicen la producción y uso de las materias primas y mejoren la competitividad de la industria.