El índice de Precios de Consumo (IPC) ha experimentado una caída de una décima en el mes de noviembre con respecto al mes de octubre, con lo que la tasa anual es del 2,9%, seis décimas por debajo de la registrada en octubre.
Los grupos con mayor influencia en este descenso son el transporte, el ocio y cultura, las comunicaciones y vivienda.
Así, el transporte, cuya variación anual disminuye más de tres puntos, se sitúa en el 3,1%, debido a las bajadas de los precios de los carburantes y lubricantes, que aumentaron en
noviembre de 2011, y los automóviles, motivada, en gran parte, por el efecto del Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente (PIVE).
El ocio y cultura presenta una variación anual del 1,2%, ocho décimas inferior a la del mes de octubre, consecuencia en su mayoría del descenso de los precios de los servicios recreativos y deportivos, que subieron el pasado año, y del viaje organizado, que
disminuyen más que en 2011.
Por su parte, las comunicaciones reducen su tasa un punto situándola en el –2,7%, principalmente a causa de la bajada de los precios de los servicios telefónicos.
La vivienda cuenta con una tasa anual del 5,8%, tres décimas por debajo del mes anterior. Este comportamiento se explica por la bajada de los precios de los gasóleo para calefacción.
A pesar del descenso de la tasa anual del IPC general, cabe señalar el aumento de la tasa de las medicinas, cuya variación se incrementa tres puntos hasta el 13,5%. Esta subida se debe a la estabilidad de los precios de los medicamentos y otros productos farmacéuticos, que descendieron en noviembre de 2011.
Y a los alimentos y bebidas no alcohólicas, con una tasa anual del 2,9%, cuatro décimas superior a la del mes pasado. Las parcelas que destacan por su influencia en este aumento son los aceites, las legumbres y hortalizas frescas, la carne de ave y las patatas y sus preparados.