El Consejo de Ministros de hoy ha aprobado sendos anteproyectos de ley que mejorarán el funcionamiento de la cadena alimentaria e impulsarán la integración de las cooperativas agrícolas.
Así, el primer anteproyecto tiene como objetivo aumentar la eficacia y competitividad del sector agroalimentario español y reducir el desequilibrio en las relaciones comerciales entre los diferentes operadores de la cadena de valor. Todo ello en el marco de una competencia justa que redunde en beneficio del sector y los consumidores.
Para el cumplimiento de ese objetivo, el anteproyecto se basa en un modelo mixto de regulación y autorregulación de las relaciones comerciales entre los agentes de la cadena alimentaria. En la primera parte, la regulación, se contemplan dos elementos fundamentales: los contratos alimentarios y las prácticas comerciales, que son de obligado cumplimiento para las relaciones comerciales de todos los operadores, desde la producción hasta la distribución.
En cuanto al anteproyecto de ley de fomento de la integración cooperativa, el objetivo es impulsar un modelo cooperativo empresarial, profesionalizado, generador de valor y con dimensión relevante, que contribuya a la sostenibilidad del sector agroalimentario.
El sector cooperativo español, que se caracteriza por su atomización, no presenta ninguna cooperativa entre las veinticinco más grandes de la Unión Europea. El nuevo reglamento pretende lograr que las cooperativas españolas crezcan en dimensión y capacidad y sean más competitivas.
Para ello se creará la figura “Entidad Asociativa Prioritaria” de ámbito supraautonómico, se articulará un Plan Nacional de Integración Cooperativa y ampliará los fines y actividades de las cooperativas.