La compañía PepsiCo anuncia la puesta en marcha del proyecto Euronuts para el cultivo del cacahuete a gran escala por primera vez en España. El proyecto, promovido por la compañía a nivel europeo, tiene como objetivo permitir a PepsiCo autoabastecerse de cacahuetes para su producción, envasado y comercialización en Europa.
De este modo, se trasladará paulatinamente el suministro del continente Americano a la Península Ibérica. PepsiCo comercializa sus cacahuetes en España bajo la marca local Matutano.
La primera fase del proyecto se ha iniciado con la plantación de mil ochocientas hectáreas en la Península Ibérica, de las cuáles mil corresponden a las Vegas del Guadiana (Badajoz), otras cuatrocientas a Cáceres y Sevilla, Córdoba y Cádiz y el resto a Portugal. Esto ha sido posible tras dos años de pruebas para comprobar la viabilidad de la plantación de cacahuete en la zona y que se cerraron con resultados muy exitosos.
La elección de España como punto clave para el cultivo del cacahuete se debe a cuestiones de climatología, condiciones del suelo e infraestructuras.
Ignacio Julve, Responsable del Departamento Agrario de PepsiCo Iberia, explica: “La producción de cacahuete en España permitirá a la compañía contar con un sistema robusto de suministro y tener todavía un mayor control de la calidad de la materia prima, así como cultivar variedades exclusivas para ajustarse a las necesidades concretas de la zona de cultivo y de nuestros productos”.
Este proyecto encaja con la visión de sostenibilidad de la compañía Resultados con Responsabilidad (que significa mantener un crecimiento sostenible y respetuoso con la gente y el planeta), puesto que permite acercar el origen de la materia prima a su procesado y comercialización e implementar técnicas de agricultura sostenible que PepsiCo ya aplica en otros cultivos como la patata.
El cultivo de cacahuete no requiere sólo el desarrollo en campo, sino también la estructura industrial necesaria para el tratamiento post-cosecha previo para el suministro a las fábricas de PepsiCo. Daniel Martínez, director general de Nidera, añade: “Tenemos a punto la estructura necesaria para procesar las casi 2.000 hectáreas de esta primera fase. Contamos con infraestructuras locales en Extremadura junto con las tecnologías más avanzadas en cacahuete procedentes de Estados Unidos”.
No se trata tan sólo de la introducción de un nuevo cultivo sino una nueva alternativa para la agricultura extremeña, dado que esta leguminosa es un mejorante del suelo y se complementa perfectamente con la rotación de cultivos propios de la zona como el tabaco, maíz y el tomate.
José Antonio Monago, presidente de la Junta de Extremadura, destaca: “Este proyecto es muy importante para Extremadura ya que abre nuevas puertas para el sector agrícola en la Comunidad. Nuestra región tiene un inmenso potencial en el sector agroindustrial y agroalimentario y este tipo de iniciativas demuestran que en Extremadura se puede invertir. El Gobierno extremeño va a estar al lado de los inversores, ayudando y apoyando en todo lo que necesiten para que proyectos como éste salgan adelante.”
PepsiCo demuestra de esta manera su fuerte compromiso con las comunidades donde está presente y su fuerte vínculo con la agricultura española de la que consume más de 150.000 toneladas de patata, maíz, tomate y otros vegetales. Además, proporciona a los agricultores asesoramiento en la introducción de nuevas variedades, mejora del rendimiento y calidad del cultivo, así como formación e implementación de técnicas para optimizar el consumo de agua y reducir la huella de carbono.