La próxima producción de cebolla se podría ver reducida en torno a un 20%, aproximadamente, debido al trasvase de variedades híbridas a variedades de Castilla-La Mancha cuyo coste es menor.
Así lo señalaba en la prensa local Luis Fernando Rubio, de la Asociación de Productores de Cebolla de Castilla-La Mancha (Proceda). “Se llevaron un palo gordo los productores el año pasado y no quieren que vuelva a suceder. De ahí la opción de sembrar la variedad redas”, explicaba.
El problema de la sobreproducción, decía, tiene que ver a nivel global y nos afecta a todos. Eso hace que ni siquiera se pueda plantear un almacenamiento privado mientras tengamos una competencia tan grande de países como Holanda.
En este sentido, decía Rubio que “si fuera el problema de España se podría solucionar, pero viene de Europa donde ha habido una producción récord en muchos países y eso nos afecta a todos”.
Lo único que puede jugar a favor de a cebolla española es el hecho de que se trata de cebolla nueva y eso “puede reactivar algo los precios”.
Lo que tienen claro los productores es que otro año así de malo y con los precios que cuesta la siembra “es inviable” y “no creo que se pueda sobrellevar”.