Por primera vez durante la crisis, mientras que las Regulaciones de empleo en la industria en general decrecen durante el primer trimestre de 2010 un 16,67%, en el sector alimentario aumentan en un 36,5%, con respecto al primer trimestre del año 2009.
En la industria alimentaria se registraron un total de 86 expedientes de regulación de empleo durante los tres primeros meses de 2010, lo que significa 23 más que en el mismo periodo del año anterior y un crecimiento interanual del 36´5%, mientras que el conjunto de la industria la regulación de empleo desciende un 16´67%. Igualmente, respecto al último trimestre de 2009, los expedientes de regulación en la industria alimentaria presentan un crecimiento trimestral de igual porcentaje (36´5%).
El 80´23% de los expedientes de la industria alimentaria se registran en la industria de la alimentación, el 17´44% en el sector de fabricación de bebidas y el 2´32% en la industria del tabaco.
En relación con los trabajadores afectados durante el primer trimestre del presente año, 1.886 trabajadores y trabajadoras se han visto afectados por expedientes de regulación en la industria de alimentación, bebidas y tabaco, 48 menos que en el mismo periodo de 2009, lo que supone un descenso del 2´48%, por debajo de las caídas anuales registradas en el conjunto de la industria (-65´36%) y en la economía general (-57´46%).
Respecto al trimestre anterior, contrariamente al conjunto de la economía y al sector industrial, el número de trabajadores/as se ha incrementado un 24´57%, debido fundamentalmente al crecimiento trimestral sucedido en el número de afectados en la industria del tabaco.
Según las medidas aplicadas en los expedientes de regulación en la industria alimentaria, el 65´53% de los trabajadores se ha visto afectado por medidas de suspensión de empleo, el 26´56% por medidas de extinción de empleo y cerca del 8% por reducción de jornada laboral.
Respecto al mismo periodo de 2009, los trabajadores/as afectados por medidas de extinción presentan una caída del 59%, los afectados por suspensión de empleo aumentan un 83´11% y los trabajadores/as afectados por medidas de reducción de jornada se han incrementado hasta un 302´7%.