La iniciativa La alimentación no tiene desperdicio, impulsada por la Asociación Española de Codificación Comercial (Aecoc), ha cerrado 2021 con 712 empresas adheridas. A lo largo del año, el proyecto sumó 55 nuevas compañías comprometidas con la reducción de la pérdida de alimentos que se genera con su actividad, lo que supone un crecimiento del 8% respecto al año anterior.
Desde su nacimiento en 2012, a través de esta iniciativa Aecoc acompaña a las empresas en el diseño y aplicación de estrategias para reducir el desperdicio alimentario y monitoriza los resultados logrados. A pesar de las dificultades derivadas de la pandemia, la tasa de desperdicio alimentario de las compañías de La alimentación no tiene desperdicio se sitúa actualmente en el 0,95% del total comercializado.
“El constante crecimiento de la iniciativa muestra el compromiso y el interés de las empresas en aplicar estrategias efectivas para evitar el desperdicio alimentario, un problema con un elevado impacto económico, social y medioambiental”, afirma la directora de comunicación y responsable del proyecto contra el desperdicio alimentario de Aecoc, Nuria de Pedraza.
No es la única acción que Aecoc ha llevado a cabo el año pasado para ayudar a reducir el desperdicio alimentario. Un buen ejemplo es el libro Estrellas contra el desperdicio, que reúne recetas de 30 chefs con Estrella Michelin que invitan a reflexionar sobre el valor de los alimentos, y que ya ha alcanzado su segunda edición.
Además, en 2021 Aecoc también coordinó la IV Semana contra el Desperdicio Alimentario, que movilizó a más de 30 ayuntamientos, empresas y al sector hostelero para realizar acciones de sensibilización a la sociedad.
“La prevención y reducción del desperdicio alimentario es un paso indispensable para el cumplimiento de los objetivos de sostenibilidad. La iniciativa de Aecoc persigue seguir sumando empresas, municipios e implicar a la sociedad con ideas y propuestas que les permitan reducir la pérdida de alimentos”, apunta de Pedraza.