El presidente del Partido Popular ha anunciado que el PP registrará una proposición de ley que propondrá ayudas a los titulares de explotaciones agrarias en crisis, una modificación de la Ley de Residuos y el refuerzo de la posición negociadora de los productores en los mercados agrarios.
Durante la inauguración de las Jornadas en Defensa del Sistema Alimentario Español que tuvieron lugar el pasado viernes en el Congreso de los Diputados, Feijóo se comprometió a “tener agua para todos sin tensionar a todos”, por lo que avanzó que su partido está estudiando un plan hidrológico y un plan de infraestructuras hidráulicas para producir más productos con menores costes para que bajen los precios y mantener la industria agroalimentaria
Además, insistió en pedir la bajada del IVA de la carne, el pescado y las conservas, ajustar el IRPF de las rentas medias y bajas para que conserven poder adquisitivo, que se extienda la rebaja de 20 céntimos en el combustible a los autónomos, aplazar impuestos nuevos como el del plástico, bonificar los piensos y reducir los costes energéticos
Por otro lado, rechazó los “insultos, menosprecios y descalificaciones” que han sufrido empresarios de este sector por parte del Gobierno y pidió disculpas por ello en nombre de los políticos, al tiempo que advierte de que los ataques son un “error” que “normalmente no trae buenas noticias sino malas, como la conocida esta semana”.
El líder del Partido Popular subrayó que el sector primario atraviesa grandes dificultades debido a la crisis de suministros, la subida de los costes de producción, los nuevos impuestos, el recorte de ayudas de la PAC y el ninguneo en los fondos europeos ante la “ausencia” del Ministerio de Agricultura.
Asimismo, censuró que frente al incremento “ininterrumpido” del precio de los alimentos, la energía y las hipotecas que “ahoga” a las familias, el Gobierno está dividido en torno a la intervención de los precios y “ha dedicado mucho tiempo a buscar excusas y poco a encontrar soluciones”.
Feijóo recordó que el sector agroalimentario representa más del 10% del PIB español, supone casi tres millones de puestos de trabajo, su volumen de exportaciones supera los 60.000 millones de euros y es un valor de la Marca España.
Por último, reivindicó la celebración de esta jornada en el Congreso en un momento en que la Cámara Baja “es noticiable por actividades menos edificantes” y abogó por “iniciar nuevas etapas donde se dediquen esfuerzos a hablar de los problemas de los ciudadanos y no para engañarles”.
El sector pide no ser criminalizado
Durante la jornada, representantes de Asedas, Aces, Anged, Fiab y Aecoc Supermercados, volvieron a reclamar al Gobierno medidas para paliar el alza de los precios de la alimentación entre las que destacaron que se incluya a más productos como carne, pescado y conservas en la bajada del IVA y ayudas a las empresas como que se retrasen los costes regulatorios medioambientales un año, que están lastrando a las empresas.
Así, han reconocido que las medidas adoptadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez ante la situación de alza de precios de alimentación son «correctas, pero insuficientes», por lo que han reclamado que se pongan en marcha medidas que ayuden a bajar los costes de producción y a las familias que lo están «pasando mal» por el alza de los precios.
Además, han lamentado los ataques que está sufriendo el sector, al que han pedido que no se criminalice ya que las empresas y los empresarios están siendo parte de la solución.
Por su parte, los representantes de las organizaciones agrarias, también presentes en la jornada, destacaron que no se espera que los costes que han subido fuertemente, como los fertilizantes, la energía… desciendan por lo que es difícil también que los precios bajen. Expusieron también problemas del sector agrario como el incremento del SMI, que ha subido un 56% en los últimos años, la escasez de mano de obra o la falta de relevo generacional.
Durante el acto tuvo lugar también una ponencia sobre la inflación y la cesta de la compra, a cargo de José Antonio Latre Ballarín (partner en EY-Parthenon Retail y Consumo) en la que se explicó que la inflación actual en el sector alimentario es de costes y no de márgenes comerciales. Destacó, además, que el gran problema de la cadena de valor agroalimentario es que no genera el suficiente valor añadido bruto para remunerar a sus agentes, lo que supone que al no generar valor añadido bruto, se traslada a los precios la subida de costes.