En el acumulado de enero a noviembre de 2019, la exportación hortofrutícola española ascendió a 12 millones de toneladas y 12.131 millones de euros, lo que supone crecimientos del 9% y 5% respectivamente, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, procesados por Fepex.
En concreto, las ventas de hortalizas se elevaron a 4,9 millones de toneladas, un 6% más por un valor de 5.059 millones de euros (10%), destacando el buen comportamiento del pimiento, con 765.000 toneladas (11%) y 973,6 millones de euros (15%) y las coles, con un crecimiento del 21% en volumen y valor, sumando 424.637 toneladas mientras que las ventas de lechuga descendieron en volumen, un 5%, situándose en 638.550 toneladas, pero aumentaron en valor, con un 5% más y 63 millones de euros. En este periodo, el pimiento ha superado a la que era la hortaliza más exportada por España, el tomate, con unas exportaciones de 671.285 toneladas (5%) por un valor de 802 millones de euros (0,3%). Sin embargo, baja significativamente el valor de algunos productos.
Por su parte, la exportación de fruta frescas hasta noviembre se situó en siete millones de toneladas, un 12% más, por un valor de 7.071 millones de euros (3%), con notables crecimientos del volumen de los principales productos: cítricos, fruta de hueso, y en especial melocotón con 398.276 toneladas (5%), nectarina con 427.815 toneladas (20%) y ciruela con 93.062 toneladas (30%); sandía con 906.755 toneladas (6%) y melón con 453.147 toneladas (13%).
Respecto al mes de noviembre de 2019, la exportación española de frutas y hortalizas frescas ascendió a 1,2 millones de toneladas y 1.273 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 8% en volumen y del 9% en valor con relación a noviembre de 2018. Las exportaciones de hortalizas sumaron 573.124 toneladas, un 11% más que en el mismo mes de 2018 por un valor de 574 millones de euros (5%) y las de frutas se situaron en 707.478 toneladas (6%) por un valor de 698 millones de euros (12%).
Para Fepex, los datos globales hasta noviembre “reflejan una evolución positiva del conjunto del sector, especialmente en volumen, pero incluyen situaciones muy dispares y, en algunos casos, comportamientos negativos de producciones destacadas, como la fruta de hueso por el descenso del valor obtenido por las exportaciones, o como el tomate, cuyas ventas han descendido y soporta una fuerte presión en los precios en los mercados comunitarios ocasionado por la competencia extracomunitaria”.