Consum estrena este miércoles su nuevo modelo de tienda en la apertura de Benicàssim (Castellón), que ha supuesto una inversión de más de 4,3 millones de euros. Se trata de un supermercado ecoeficiente, en el que prima la experiencia del cliente y la sostenibilidad, simplificando los muebles, la disposición de los productos, los colores y la iluminación, para facilitar la compra y que sea personalizada, cómoda y ágil.
La compañía de distribución tiene previsto ir implantando este nuevo modelo de tienda en todas las nuevas aperturas que realice a partir de ahora, así como en las reformas.
Este nuevo prototipo de establecimiento prioriza las secciones de frescos, como elemento diferenciador de Consum, dando mayor protagonismo a la experiencia del cliente, mediante una nueva disposición del producto en una altura óptima.
También se ha mejorado la experiencia, mitigando el sonido del pavimento mediante baldosas especiales y se ha suprimido la mayor parte de la cartelería aérea, eliminando el ‘ruido visual’, buscando una información más clara sobre el fondo blanco del mobiliario, para facilitar la comprensión del mensaje. En la ambientación predominan los tonos claros y naturales, donde el naranja corporativo de Consum se mantiene de forma sutil, pero no es el protagonista del supermercado.
Por otro lado, el nuevo supermercado de Benicàssim consume un 40% menos de energía que un supermercado convencional, gracias a sus instalaciones frigoríficas que utilizan CO2, un refrigerante natural que reduce las emisiones de efecto invernadero. Actualmente, casi un centenar de supermercados Consum ya disponen de estas instalaciones, que se suman a otras medidas de eficiencia energética, como iluminación led, instalación de puertas y tapas en el mobiliario frigorífico, control domótico, etc.