Casa Tarradellas cerró el pasado año 2018 con una plantilla de más de 2.000 personas y una facturación de 936 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 3% respecto al ejercicio anterior.
En la actualidad, la compañía acaba de iniciar la cosecha del trigo en un año en el que nuevamente la meteorología marca sus tiempos debido a las escasas lluvias en otoño y primavera y el exceso de agua en el punto de la siembra y mes de mayo.
Por otro lado, “la presente cosecha consolidará el proyecto del almacén de trigo que empezó a operar la anterior campaña con la instalación y puesta en marcha de un total de 2.000 metros cuadrados de placas solares”.
El edificio, que cuenta con una capacidad de almacenamiento de más de 10.000 toneladas, supuso una inversión de 10 millones de euros y actualmente con la superficie de placas solares instaladas ya opera al 100% con autoconsumo fotovoltaico.