Una vez finalizada la campaña de la castaña en Málaga, los técnicos de Asaja Málaga revelan que se ha recogido unos dos millones de kilogramos, lo que supone una caída de casi el 50% con respecto al año anterior.
La calidad de la castaña pilonga ha sido extraordinaria, pero la campaña ha sido corta, muy dura y trabajosa y, “encima, el esfuerzo no se ha visto recompensado por la producción”, aseguran desde Asaja.
“Los malagueños han comido poca castaña, el tiempo no ha acompañado ni las ha hecho especialmente apetecibles, por lo que la mayoría de los productores han optado por la exportación para salvar sus cuentas”, explican desde la organización.
La campaña del año pasado fue una de las mejores de los últimos años, por la excelente calidad y la alta producción, rondando la cifra de 3,9 millones de kilogramos de castañas.
En cuanto a los precios, al comienzo de la recolección de la pilonga, se pagaba a dos euros a los agricultores, a los pocos días bajó a 1,50 euros, y, posteriormente, cayó hasta su precio final, 1,20 euros el kilogramo.
El principal almacén llegó a comercializar cinco millones de kilogramos. Esta campaña, el 70% de la castaña comercializada por ellos se ha destinado a exportación, principalmente a Italia (un 40 %), Alemania (un 10 %) y Francia (un 20%). El 30 % restante se ha comercializado en el mercado interior.