En 2020, más del 50% de las transacciones comerciales no alimentarias en los mercados maduros tendrán influencia digital, según concluye el estudio Retail 2020 de Jones Lang LaSalle con el objetivo de identificar las tendencias clave que están transformando rápidamente el panorama de las superficies comerciales en el mundo.
Luis íñiguez, director de la División de Retail de Jones Lang LaSalle, declaró: “Tras mantener reuniones con clientes y grupos de distribución en Europa y examinar los nuevos datos, hemos dibujado un cuadro detallado de cómo tiene que evolucionar el sector de la distribución en la próxima década, pero lo que es más importante, hemos elaborado un nuevo “reglamento” para ayudar a los distribuidores a mantenerse a la cabeza. La eficiencia, el aumento de la capacitación y la flexibilidad serán las claves del éxito futuro”.
El Reglamento analiza y sintetiza, en cinco puntos clave para distribuidores e inversores, las consecuencias prácticas de las tendencias pronosticadas para la distribución:
– El enfoque tecnológico como filosofía y no meramente como herramienta: No hay mayor fuerza perturbadora en el sector de la distribución en la actualidad. Afecta a todo, desde la estrategia del canal y los precios de los alquileres hasta la comunicación con los consumidores. Los distribuidores y propietarios deben dejar de ver Internet como un competidor externo e incorporarlo en sus estructuras y ajustar sus modelos de negocio consecuentemente.
– La sostenibilidad es un gran riesgo, pero también una oportunidad para inversores en superficies comerciales: Los nuevos centros comerciales de calidad ofrecerán una prima ecológica. El funcionamiento de un centro bien diseñado y gestionado debería ser más rentable y tener niveles de alquiler con menor probabilidad de verse reducidos. Garantizar que un centro es claramente más eficiente lo hará más atractivo que su vecino no ecológico y también más fácil de vender en el futuro.
– Aumentar la capacitación, asociarse y diversificar para sobrevivir: Aquellos que posean capital tendrán que recurrir cada vez más a administradores especializados, cuya influencia se extenderá rápidamente. Aumentarán las diferencias en las aptitudes profesionales de cada uno. Esto es particularmente importante para el desarrollo y la renovación si tenemos encuenta la proporción de nuestros inmuebles comerciales que está alcanzando o ha alcanzado la obsolescencia.
– Para la mayoría de centros comerciales, el marketing está en gran parte subestimado y a menudo es escaso. Los distribuidores y propietarios tienen que aumentar su capacitación para crear experiencias de compra diferenciadas y exitosas que permitan a los consumidores saber que usted está ahí, manteniendo su interés y, en última instancia, su gasto.
– La naturaleza de la globalización, de las comunicaciones electrónicas instantáneas, de la ultramovilidad transformará el sector de la distribución en un mundo de extremos —mejor ocio, oferta superdominante, captaciones regionales y el diseño más elevado—. El consumidor espera más y si su oferta comercial o su inmueble comercial no se lo ofrece, se irá a otro sitio.