Sólo un 3,25% de los españoles posee un entendimiento profundo del aceite de oliva en cuanto a sus atributos, tipos de aceituna, procedencia o proceso de producción. A pesar de ello, el 50% de la sociedad española manifiesta un creciente interés por la cultura del aceite, con unos comportamientos similares a los que experimentó el mundo del vino en su momento.
Este es uno de los datos recabados por el I Observatorio Mueloliva sobre el Buzziness y el Aceite de Oliva en España, desarrollado por MyObserver para Mueloliva, productora y comercializadora de uno de los 8 mejores aceites del mundo, Venta del Barón. Un estudio que nace de la apuesta de uno de los sectores de mayor peso en la agricultura española por la reinvención de la manera de comercializar su producto en la nueva era digital.
El estudio, realizado con una novedosa metodología denominada Buzziness que se basa en el análisis de todos los comentarios, informaciones y opiniones vertidas en Internet, recoge los principales hábitos de consumo y compra de los españoles respecto al aceite, así como su conocimiento del producto, países competidores, nuevos nichos de mercado y los actores e instituciones con un mayor rol en el sector del oro líquido de nuestro país. Para ello, MyObserver ha analizado cerca de 5.000 webs y soportes sociales 2.0 (redes sociales, blogs y foros), más de 39.000 documentos alojados en Internet y 148.164 comentarios vertidos por los usuarios españoles.
Otra de las conclusiones a las que llega el estudio promovido por Mueloliva está relacionada con la creciente asociación que hace la sociedad entre el aceite y sus propiedades beneficiosas para la salud. Así, una gran parte de los españoles considera que el aceite tiene un efecto benefactor para el tratamiento y la prevención de enfermedades como la arteriosclerosis (28’64%), el colesterol (17,15%), los riesgos cardiovasculares (7,80%), la diabetes (7,46%) o la tuberculosis (4,46%). Sin duda, un nicho de mercado con un gran potencial que hasta el momento ha sido poco explotado por las aceiteras españolas.
La procedencia del aceite de oliva no es una variable que determine la elección del consumidor. Así, la relevancia que adquiere en las valoraciones que los usuarios hacen de los distintos aceites no supera el 5%. Aún así, los aceites procedentes de Andalucía son los más populares entre los españoles, alcanzando una representación del 33%. Dentro de esta comunidad, Jaén, Córdoba y Sevilla son las regiones que se llevan la palma en comercialización de sus aceites.
Si atendemos a la popularidad de las Denominaciones de Origen, el Top 5 está compuesto por las de Antequera, Baena, Estepa, Priego de Córdoba y Sierra de Cazorla. Las dos primeras acaparan el 50% de los comentarios e informaciones relacionadas con las Denominaciones de Origen y Priego de Córdoba adquiere un peso progresivo del 13,32% sobre el total. Del mismo modo, denominaciones como la valenciana, madrileña, Lucena o Montoro-Adamuz comienzan a ser conocidas levemente por los usuarios de Internet.
Cuando un español elige un aceite de oliva virgen extra lo hace, primero, por su precio (el 38,7%) y, segundo, por su calidad (21,97%). Asímismo, la venta de la experiencia y de la tradición supone uno de los activos más importantes para el éxito de un aceite. La mayoría de los españoles compra aceites que se comercializan bajo conceptos relacionados con el origen y la tradición, los beneficios para la salud o la excelencia en su proceso de producción y extracción. En cuanto a los atributos positivos que más valoran los españoles (con un conocimiento profundo o profesional del producto) en un aceite están el que este sea amargo (21%), picante (19%), verde (13,5%) y con reminiscencias a manzana (12,67%) y a sabores herbáceos (7,99%).