La Agencia de Medio Ambiente de Inglaterra y Gales asegura en un estudio que las bolsas comerciales de plástico tradicionales son menos perjudiciales para el medio ambiente que las fabricadas con otros materiales.
Según este estudio, la bolsa de algodón se debe reutilizar 131 veces, la bolsa de rafia 11, y las bolsas de papel tres veces para que tengan un efecto sobre el calentamiento global inferior al de una bolsa convencional de plástico no reutilizable.
Estas conclusiones las recoge la Asociación Valenciana de Empresarios de Plásticos (Avep) y el Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas), en el estudio que han elaborado conjuntamente, titulado “Bolsas comerciales de plástico. Situación actual”.
Así, Edén León, del Observatorio de Mercado de Aimplas, asegura que “la mejor opción medioambiental para sustituir a las actuales bolsas comerciales de un solo uso son las bolsas reutilizables, cuando se usan al menos 10 veces”.
El informe destaca que el plástico solo consume el 4% de la producción mundial de petróleo, además de ser más ligero y resistente que otros materiales. Las bolsas se pueden reutilizar para otros usos, son 100% reciclables y ocupan muchos menos espacio, con las consiguientes reducciones de CO2 en su transporte. Una tonelada de bolsas de papel contiene 18.000 unidades, mientras que la de plástico contiene 105.000 bolsas.
Por su parte, Sergio Giménez, responsable del área de Negocio y Desarrollo de Mercados, considera que el problema no es la bolsa de plástico en sí, sino “el mal uso que se hace de ella, con un consumo excesivo y una baja tasa de reciclaje, ya que en muchas ocasiones acaban siendo desechadas sin control”. Esto constata que el problema reside en el comportamiento del consumidor, no en el producto ni el material.
Así, en una encuesta realizada para el informe a más de 300 consumidores de la Comunidad Valenciana (error muestral del 8%) se desprende que el 40% de los encuestados desconoce dónde deben depositarse las bolsas tras su uso final.
Esta encuesta revela también que más del 85% de los consumidores reutiliza habitualmente las bolsas actuales de un solo uso, la mayoría como bolsa de basura. Además, el 65% afirma que no está dispuesto a pagar por las bolsas de plástico de un solo uso no biodegradables.
España es el mayor productor de bolsas de plástico en la Unión Europea. Según Cristina Monge, secretaria general de Avep, “cuando se valora el impacto medioambiental de un producto es preciso tener en cuenta todos los factores del ciclo de vida del mismo y en este sentido los estudios corroboran que la bolsa de polietileno es la que mejor se comporta medioambientalmente hablando”.